Señalan investigadores de la masacre en Virginia que se han reunido 500 piezas de evidencia sobre el caso.
El autor de la matanza en la Universidad Virginia Tech disparó más de 170 balazos en nueve minutos y se suicidó de un disparo a la cabeza en un aula, rodeado por los restos de sus víctimas, dijeron las autoridades ayer.
La Policía reveló nuevos detalles sobre el caso en una conferencia de prensa en el campus de Virginia Tech, pero agregó que los investigadores aún no saben qué precipitó el ataque en que un joven mató a 32 personas y se suicidó -la peor masacre civil en la historia estadounidense-.
Seung-Hui Cho, de 23 años, bloqueó con cadenas tres entradas públicas al edificio universitario Norris Hall, indicó la Policía. Dos horas antes, había asesinado a balazos a sus dos primeras víctimas en un edificio de dormitorios de estudiantes al extremo opuesto del campus.
El superintendente de la Policía Estatal, el coronel W. Steven Flaherty dijo ayer que los investigadores habían reunido 500 piezas de evidencia sólo en Norris Hall, pero aún no podían determinar qué motivó a Cho a ejecutar la matanza indiscriminada.
“Hemos hablado de posibles causas y teorías de uno y otro tipo, pero no tenemos una evidencia clara que nos dé una pista”, señaló Flaherty.
Esperan se reflexione sobre Ley de tenencia de armas
El relator especial de la ONU para el Derecho a la Educación, Vernor Muñoz, afirmó ayer que espera que la reciente matanza en la Universidad Tecnológica de Virginia (EU) haga reflexionar a la sociedad estadounidense sobre la posibilidad de modificar la Ley de tenencia de armas.
“Dado que ya han ocurrido otros incidentes similares en centros educativos, espero que el nuevo debate sobre la implicación de la Ley en la tenencia de armas que ha desencadenado ese triste suceso en Estados Unidos, anime a la sociedad a considerar la posibilidad de revisarla”, señaló Muñoz mediante una declaración escrita.
El relator de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) calificó de “inaceptable” cualquier ataque que se realice contra escuelas, universidades, estudiantes y profesores y subrayó que “el derecho a la educación necesita un entorno seguro”.
Tras lamentar lo ocurrido y expresar sus condolencias a los familiares y amigos de las víctimas, Vernor Muñoz sostuvo que está seguro que “las autoridades estadounidenses no escatimarán esfuerzos para investigar ese trágico episodio”.