Marcelo Ebrad acusó que los panistas han tomado esta decisión como una revancha política, por las diferencias que hay con el gobierno local y el PRD.(Archivo)
El jefe de Gobierno capitalino, Marcelo Ebrard, denunció que el Partido Acción Nacional (PAN) en la Cámara de Diputados quiere aplicar "antichilangazo-gasolinzo" contra la ciudad en la aprobación de la reforma fiscal, al pasar literalmente de noche una propuesta que le quitaría a la capital del país cinco mil millones de pesos.
Advirtió que de concretarse esta intentona panista, se cancelarían programas educativos de gobierno, entre los que están las becas a bachilleres, uniformes escolares y apoyo a niños talento, así como la instalación de ocho mil cámaras de seguridad, obras de ampliación en la infraestructura de agua y de transporte, pero aún más se tendrían que incrementar las tarifas del Metro y agua para el siguiente año.
Acusó que los panistas han tomado esta decisión como una revancha política, por las diferencias que hay con el gobierno local y ante el hecho de que el Partido de la Revolución Democrática (PRD) en la Cámara de Diputados no quiere apoyar la reforma fiscal.
Ebrard dijo que con esa propuesta albiazul, se le quitarían a la Ciudad de México tres mil millones de pesos bajo un criterio poblacional, pues cifras del Instituto Nacional de Geografía, Estadística e Informática (INEGI) establecen que el número de habitantes en el Distrito Federal no ha crecido y, por lo tanto, no se tendrían que entregar recursos a la ciudad.
Otros 2 mil millones de pesos se le quitarían al DF de los recursos participables que se obtuvieran con la creación de un impuesto adicional de 5.5% a las gasolinas, con la trampa de que en la propuesta se establece que los recursos participables se distribuirían entre los "estados", no entre las "entidades".
El problema aquí es que el Distrito Federal no es un estado, y esto prácticamente deja fuera a la ciudad de ese presupuesto participable.
"La motivación es política, es dejar al gobierno de la ciudad sin dinero el año que entra", acusó Ebrard, quien además lamentó que de concretarse esta maniobra perdería toda eficacia la reestructuración de la deuda, a través de la cual la administración local planeaba ahorrar mil 500 millones de pesos al año.
"Estarían obligando al gobierno de la ciudad a tener que ajustar tarifas como el Metro o como el agua, porque si le quita a los ingresos del Distrito Federal cinco mil millones de pesos, pues evidente que ya no podríamos hacer ningún programa adicional", advirtió el mandatario local.