La crisis económica actual, ha obligado a muchas familias maderenses a establecer puestos ambulantes para sobrevivir.
POR CECILIA AGUILAR
EL SIGLO DE TORREÓN
FRANCISCO I. MADERO, COAH.- La crisis económica en muchos de los hogaresha provocado que cada vez sean más las personas que han decidido establecer un puesto ambulante para obtener una ganancia, por mínima que ésta resulte.
Es que la falta de un ingreso económico suficiente para el sustento familiar diario, ha obligado a las familias a decidarse a la venta de alimentos e infinidad de productos.
Estela Díaz de Hernández comenta que por un accidente en el trabajo, su esposo desde hace años, goza de una incapacidad permanente que la obligó a montar un puesto de venta de frutas frescas y frituras.
Empezó vendiendo poco, tan así que sólo lograba recuperar la inversión. Al pasar el tiempo, “ahora al menos saco para chiviar...”, expuso la mujer, quien se quejó de la situación actual en la que se encuentra el país con pocas oportunidades para discapacitados como su marido.
“El Gobierno no ofrece nada mejor a la gente que como uno, con el sudor de su frente, se gana la gorda diaria...”, reclamó para luego decir que se consuela porque su caso no es el único, ya que cada vez, son más las familias que están en crisis.
La señora Dolores Ramírez de Escobar y su esposo, Tito Escobar, también luchan todos los días para sacar adelante a sus hijos que estudian el nivel secundaria. De la venta de gorditas en un puesto ambulante en su casa ubicada en la colonia Insurgentes, sobreviven.
“Todos lo días de la semana, amaso harina”, expuso la mujer para comentar que hay días buenos y malos pero que por fortuna, saca algo de ganancia y le queda dinero para invertir en la compra de los ingredientes del producto.
“Mi marido y yo estamos metidos en este oficio, ya que él no ha logrado asegurar un empleo permanente, por eso, también le echa ganas al negocito”, manifestó la mujer quien se quejó por la carestía de la vida.
Aquí en Madero hay mucha necesidad, además cada vez, “vemos un aumento en las productos de primera necesidad, por eso, se completa menos...”.
No hay peligro sanitario
El titular del Departamento de Regulación Sanitaria de la Jurisdicción Sanitaria número VII, Herlindo Calderón González, dijo que en recientes fechas, la dependencia ha notado un aumento considerable en la cantidad de puestos dedicados a la venta de alimentos.
Aunque algunos que son característicos de la temporada, como los de aguas frescas o la fruta picada, están por despuntar. Todo es por la falta de oportunidades laborales e ingresos en las familias, situación que los obliga a complementar su actividad o dedicarse de lleno a la venta de estos productos.
Ante ese aumento, se han ampliado también las labores de inspección sanitaria, mediante la toma de muestras de los alimentos preparados, sin que hasta ahora se haya detectado ninguna situación que ponga en riesgo la salud pública.
La necesidad
La proliferación de puestos ambulantes de comida en las calles, es el reflejo de la necesidad económica de las personas.
Cada vez son más las personas que se han decidido a establecer un puesto ambulante para obtener una ganancia.
La falta de un ingreso económico suficiente para el sustento familiar diario, ha obligado a las familias a dedicarse a la venta de alimentos e infinidad de productos.
El Departamento de Epidemiología de la Jurisdicción Sanitaria número VII, no ha detectado en puestos ambulantes alguna situación que ponga en riesgo la salud pública.