Hay muertos que no ganan lana/ y es más duro su penar
Como decía Rod Stewart, hay tipos que tienen toda la buena suerte. Mientras uno batalla para librar la quincena, vive quejándose de lo poco que gana, y se mata sobándose el lomo para llevar una mínima pitanza al hogar; hay quienes son millonarios sin mover un dedo, y ganan todavía más con la simple pulsión de una tecla de computadora, aplastadotes frente a su escritorio.
Peor aún: hay quienes ganan ingentes cantidades de dinero... sin radicar ya en este planeta. Sí, hay difuntos que, pese a estar empujando margaritas y sirviendo de aperitivo a los gusanos desde hace tiempo, continúan engordando chequeras y cuentas de banco.
Claro que no son sus chequeras ni cuentas de banco; sino de sus deudos o de los fideicomisos que se establecieron para administrar la lana que sigue fluyendo vía derechos de autor. Pero para el caso: hay muertos que continúan ganando dinero… y mucho más que la mayoría de los vivos.
Hace unos días, la revista Forbes publicó su lista anual de los difuntos que hicieron más dinero desde octubre del año pasado (razón por la cuál Pavarotti, por ejemplo, no se halla en la misma). Al contrario de lo que ocurre con los vivos, los muertos que siguen ganando millones no pertenecen al ámbito empresarial ni financiero. Más bien se mueven (bueno, se movían) en la farándula, el mundo del espectáculo y el entretenimiento.
Para variar y no perder la costumbre, la lista la encabeza Elvis Presley. Ello ha venido ocurriendo desde hace ya buen rato, dado que los discos de El Rey siguen vendiéndose como pan caliente. Elvis the Pelvis ganó 49 millones de dólares el año pasado… tres décadas después de su desdichada muerte por obesidad, sobredosis de pastillas y simple sentido del ridículo.
Dos ex Beatles quedaron en el Top 10. John Lennon con 44 millones y George Harrison con 22 ocuparon las posiciones segunda y cuarta en la lista de Forbes. Ello se debió a una reestructura de las ganancias de los Beatles, luego que se resolvió una broncota entre disqueras, promotoras y la firma Apple. La de discos, no la de computadoras.
En tercer lugar quedó un personaje entrañable: Charles Schulz, el creador de la serie de tiras cómicas “Peanuts”. Las aventuras (más bien desventuras) de Charlie Brown, Snoopy, Linus y la pandilla de filósofos neoexistencialistas que nunca han pasado de primaria se siguen publicando en cientos de periódicos, y no sólo en la Unión Americana. Por no decir nada de los libros, películas y obras de teatro que giran en torno a los predicamentos del muchachito de la cabeza redonda.
Así pues, los muertos talentosos siguen generando billetes color lechuga mientras tocan la arpita trepados en su nube. Y uno acá, como decíamos…
Mañana seguimos con el tema. Por hoy, ya me dio coraje.