CUENCAMÉ, DGO.- Hasta en un 20 por ciento se ha incrementado la demanda de consulta en los centros de salud y hospitales en los últimos días, con motivo de una mayor incidencia de las enfermedades respiratorias.
A diferencia de la Región Lagunera, en el resto del estado el aumento ha sido hasta de un 25 por ciento, debido a que la disminución de las temperaturas en el primer caso no ha resultado tan marcada a comparación con los años anteriores.
La Secretaría de Salud informó que por este motivo, se han girado las indicaciones para que el personal que labora en las instituciones, enfatice ante la población usuaria sobre las medidas preventivas de dichos padecimientos, los cuales pueden llegar a generar complicaciones graves si no se atienden oportunamente en el caso de los menores de cinco años de edad y los mayores de 60.
Es posible evitar males
La Jurisdicción Sanitaria Número Dos indicó que es posible evitar los cuadros gripales comunes y con ello, el riesgo de que se conviertan en infecciones severas, y una de las medidas más oportunas es no exponerse a los cambios bruscos de temperaturas.
Según los pronósticos meteorológicos por el paso del Frente Frío Número 13 en fase entrante, los valores de temperatura para los siguientes días, se estiman de 2 a 3 grados centígrados como mínimo por la noche y madrugada en la capital del Estado, situación que se acentuará en las regiones de la parte alta de la sierra, y de 23 a 25 grados al máximo, por lo que habrá de mantenerse la alerta en el autocuidado de nuestra salud.
En la Región Lagunera el descenso será menor, aunque es importante que la población observe las medidas preventivas de la misma forma.
Riesgo eventual
El manejo de anafres, calentones, estufas y otros artefactos que producen calor, siempre será un eventual riesgo para la seguridad y salud de las personas, por lo que sugiere un uso adecuado y precautorio en donde no se exponga el bienestar personal o de una familia en su conjunto.
Otra de las recomendaciones es no recurrir a la automedicación, la cual es una práctica adversa ante cualquier padecimiento; en lugar de ello, es necesario acudir a la unidad médica que le corresponda para que la persona enferma sea valorada por un profesional y así estar en condiciones de solucionarle algún quebranto en su bienestar.
Los grupos de edad de menores de cinco años y adultos mayores de 65, son los segmentos más propensos a un evento de esta naturaleza, por lo que no hay que exponerlos a sitios en donde se puedan contagiar ni tampoco en situaciones de riesgo, como la exposición deliberada a la intemperie o dejar de utilizar ropa adecuada, ni tampoco abandonar la alimentación rica en vitamina C y la hidratación oral.