El impacto del sudor excesivo en la calidad de vida de las personas es grave, provoca una disminución en las actividades diarias, así como en la relación con otras personas.
El calor es una de las causas de este molesto fenómeno, que también ataca en situaciones estresantes.
Seguramente, al escuchar la palabra hiperhidrosis se piensa en agua, pero difícilmente se atina a decir que se trata de una enfermedad que produce sudoración excesiva, ya sea en un día cálido o en uno helado. Es un asunto delicado, pues suele provocar situaciones embarazosas.
De acuerdo con el dermatólogo Francisco Castillo Villarruel, sudar es bueno, pero en exceso puede generar la aparición de ciertas infecciones en la piel o infestaciones por hongos o bacterias.
Es importante que cuando se presente esta enfermedad se recurra a un médico especialista que esté capacitado para diagnosticar la causa, el tipo de manifestación, así como el tratamiento más adecuado.
El día que se saluda de mano a un personaje o en el que se conoce a la pareja ideal hay mucha gente que se cuida de mantener las distancias, pues sabe que sus manos se encuentran húmedas y al estrechar otras se pondrá en evidencia. Hay quienes tienen un pañuelo para usarlo en caso de emergencia o personas que se secan incesantemente las palmas con faldas o pantalones.
En época de altas temperaturas el cuerpo suda, mucho o poco, depende de cada persona. En algunos casos es normal, pero los médicos saben que existe un trastorno conocido como hiperhidrosis, que provoca la secreción excesiva de líquido en diferentes partes del cuerpo.
El sudor en demasía se produce en axilas, cara, palmas de las manos y plantas de los pies.
Muchas personas recurren al talco para su control, pero desconocen que los dermatólogos recomiendan la aplicación de botox, fármaco que ayuda a paralizar los nervios que estimulan las glándulas sudoríparas.
LA ÚLTIMA GOTA
La Sociedad Internacional de Hiperhidrosis dice que según sus registros, 3 por ciento de la población mundial padece este trastorno, pero se estima que el porcentaje de afectados es mayor, pues no existe un conteo preciso.
Esto se debe a que muchas personas consideran que es una condición normal, la cual asocian a la falta de higiene y descuido, y 70 por ciento de los pacientes con hiperhidrosis se siente afectado en su vida social.
El impacto de este mal en la calidad de vida es grave, provoca una disminución en las actividades diarias, así como en la relación con otras personas. El 74 por ciento de los mexicanos se ha sentido molesto por el sudor de otras personas y 26 por ciento se ha encontrado en alguna situación incómoda provocada por su propio sudor.
El sudor excesivo lo detecta cualquier persona, pero se debe acudir al dermatólogo, quien sabe que existen tratamientos para tratar la hiperhidrosis. Los más comunes son la aplicación de botox, antitranspirante de cloruro de aluminio, la iontoforesis, tratamientos orales y las cirugías.
La aplicación de la toxina botulínica relaja las glándulas sudoríparas de manera segura, logra que disminuya la producción excesiva de sudor y hoy en día se considera el método más novedoso y efectivo para tratar este trastorno, apunta el doctor Castillo Villarruel.
Los expertos dicen que este producto permite solucionar el problema de manera casi instantánea, ya que no se necesita ingresar a un quirófano. El 92 por ciento de las personas tratadas con botox declara estar satisfecha con el resultado del tratamiento.