Señalan que ya existe el juicio político que sirve para definir la suerte de los funcionarios que no hagan bien su trabajo
SALTILLO, COAH.- Al encaminar una propuesta de reforma electoral que se discutiría en septiembre próximo, el Congreso del Estado eliminó la posibilidad de dar forma jurídica a la revocación del mandato, bajo el argumento de que ya existe en la legislación el juicio político que en teoría sirve para definir la suerte en el servicio público de los funcionarios que no hagan bien su trabajo.
“El rechazo fue unánime, no va a ser tocado en virtud de que ya existe el juicio político, de que hay los
instrumentos jurídicos para poder enjuiciar al funcionario público que no cumpla con las expectativas”, señaló el diputado priista Francisco Saracho Navarro, quien encabeza al grupo de legisladores que revisan
las propuestas para modificar la Ley de Instituciones Políticas y de Procedimientos Electorales.
“No hay por parte de ninguna fracción (parlamentaria) o de ningún partido político (la intención) de tocar este tema de la revocación del mandato, fue rechazado y en lo particular no le veo ningún caso a la evocación del mandato porque ya existe el juicio político”, indicó.
Los legisladores también echaron a bajo la posibilidad de empatar las elecciones locales con las federales,
pues si bien está claro el ahorro de recursos públicos para campañas, su aplicación sería inoperante y ocasionaría desventaja tanto para las autoridades electorales como para los aspirantes a cargos de elección popular locales.
“No es conveniente empatar las elecciones en primer lugar porque los tiempos de campaña son muy distintos. En Coahuila están muy reducidos y si se empatan las elecciones los candidatos a diputados locales llegarían a la campaña mes y medio después de que los candidatos a diputados federales la hayan empezado”, citó como ejemplo.
“Además los medios de impugnación son totalmente distintos y los funcionarios electorales tendrían
que ser supercapacitados para dominar al mismo tiempo la legislación federal y la local”, añadió. Entre los temas “que siguen vivos” frente a la reforma electoral está la incorporación definitiva del voto electrónico, la regulación del Artículo 107 de la Lippe que impide las manifestaciones anticipadas de cualquier interés electoral y la reducción de legisladores y regidores, además de incrementar el porcentaje de votación mínimo para que los partidos políticos conserven su registro.