La celebración del 69 aniversario de la expropiación petrolera alcanzó al país en el peor de los mundos: sin petróleo para responder a una economía petrolizada y con un Petróleos Mexicanos ubicado como la empresa en su género más endeudada del planeta.
Las facturas pendientes de pago alcanzaron hasta el último día del año pasado el insólito de 56 mil millones de dólares, más del doble de los 24 mil 100 de British Petroleum; tres veces los 19 mil 580 de Petrobras de Brasil; más de cuatro los 11 mil 530 de Repsol, y seis los 9 mil 840 de Texaco.
Lo dramático del asunto es que el callejón se ubica justo cuando el país alcanzó una bonanza sin precedente por la explotación del hidrocarburo. Si entre 1980 y 2000 el precio promedio de la mezcla mexicana fue de 20 dólares por barril, durante los 72 meses del gobierno foxista llegó a 34.2.
Estamos hablando, pues, de 70 por ciento adicional, que traducido a billetes significaría 92 mil 800 millones de dólares. El problema es que la mayor parte de los recursos se canalizaron a gasto corriente.
Digamos que el llamado gobierno del cambio cometió el mismo error del régimen lopezportillista al dilapidar la bonanza. ¿Se acuerda usted cuando los panistas se llenaban la boca de denuestos contra el ex presidente que convocara al país a administrar la riqueza?
De acuerdo con el Banco de México, el gobierno foxista destinó de 1.36 por ciento del Producto Interno Bruto que representó el ingreso adicional del petróleo, el equivalente a 0.99 por ciento en gasto corriente; 0.48 en gasto de capital y 0.14 en participación a las entidades federativas… lo que llevó a un inaudito déficit equivalente a 0.48 por ciento.
México, pues, empleó ingresos temporales para financiar gasto permanente. El problema, decíamos, es que como en la fábula de la hormiga y la cigarra nos alcanzó el invierno sin provisiones. Si desde un ángulo el precio internacional del petróleo se cae dramáticamente, por el otro la oferta mexicana declina peligrosamente.
La joya de la corona, el complejo Cantarell de la Sonda de Campeche, está produciendo en este momento 62 por ciento del total de los dos mil 100 barriles que alcanzó en su cuesta mayor… con perspectivas de llegar a sólo 700 mil en 2012. Y aunque la administración actual de la paraestatal cruza los dedos para que el yacimiento de Ku-Maloob-Zaap, segundo en la escala de producción, incremente ésta en el año 2010 de 350 a 800 mil barriles diarios de petróleo, las cuentas no salen.
Integrada, la producción de Cantarell y de Ku-Maloob-Zaap llegaría a un millón y medio de barriles diarios, es decir, menos de la mitad de los tres mil 400 que se llegaron a exportar durante el foxismo, concretamente en 2004.
Y aunque en el escenario quedarían otras alternativas como la exploración en profundidades marinas, la paraestatal no tiene los recursos para jugar la carta. De hecho, todos los meses se truena los dedos para servir a su colosal deuda. El caso es que si en el periodo 1979-1982 el país cayó en un grave
déficit fiscal por la caída en el precio del crudo, hoy el escenario podría repetirse por el declive de la oferta, con la novedad de que 37 por ciento de los ingresos públicos llegan por petróleo.
La dependencia se acrecentó durante el Gobierno foxista, saltando de 30 por ciento original… frente a 19 por ciento a que llegó el gobierno salinista o 29 por ciento del zedillista.
Por lo pronto, por cada dólar de caída en el precio del petróleo mexicano de exportación, a lo largo de un año existe una disminución en las exportaciones de 850 millones de dólares. Ahora que si la baja en el precio se ubica más allá del promedio de 42.80 dólares por barril previsto en los criterios generales de política económica, el gobierno está obligado a recortar los gastos planteados en el presupuesto para este año. De hecho, si el declive es mayor de cinco por ciento, la obligación es negociar el recorte con la Cámara de Diputados, dada la prohibición de recurrir a mayor endeudamiento.
Y si le seguimos, hete aquí que bajo la fórmula utilizada por el Banco de México para manejar las divisas que le cambia por pesos a Petróleos Mexicanos, podría haber un efecto dominó sobre la paridad cambiaria.
De acuerdo con el esquema, el banco central destina parte de los dólares en la creación de reservas y parte para subastarlos al público, en un horizonte en que la venta se maneja con base en el promedio móvil de los últimos cuatro trimestres, es decir, se achicará inevitablemente.
Y como a menor oferta mayor precio…
Ahora que la Espada de Damocles provocará inevitablemente incertidumbre en la planeación del gasto público, con el consiguiente efecto nocivo para la economía. La gran pregunta es si fue torpeza o mala fe lo que colocó de espaldas a la pared a la empresa pública.
Balance general
La noticia es que el dirigente de Sindicato de Trabajadores Mineros, Siderúrgicos y Similares, Elías Morales, presentó una solicitud de amparo contra la resolución de la Secretaría del Trabajo que ubica en 70 el número de secciones que integran el órgano laboral… frente a las 265 que según la administración anterior de la dependencia estaban registradas.
La depuración realizada por el equipo que encabeza Javier Lozano Alarcón se ubicó en el marco de la construcción del escenario para una convención extraordinaria en que se defina quién es quién en el liderazgo.
Dicho con todas las letras, si la mayoría de trabajadores se inclina por ratificar a Elías Morales o le vuelve a dar su voto a Napoleón Gómez Urrutia… por más que no se descartaría la posibilidad de un tercero en la pelea.
El reclamo de protección de la justicia necesariamente obligará a retrasar el recuento.
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A contrapelo de los pronósticos optimistas del gobierno en turno, México descendió un escalón en el ranking mundial de competitividad, ubicándose en el peldaño número 30… de un listado de 45 países.
El año pasado habíamos avanzado al lugar 31. En paralelo, el país se colocó en los últimos lugares en el índice de inversión per cápita, al alcanzar un promedio de 3 mil dólares anuales…
frente a los 23 mil de Irlanda; los 14 mil de Estados Unidos o los diez mil de Canadá, naciones que ocupan los lugares séptimo y decimoséptimo.
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El anuncio de la Secretaría de Turismo de que convocará a una licitación pública para adjudicar la concesión de un nuevo aeropuerto en Playa del Carmen provocó una sobrerreacción de los inversionistas que le apuestan a las acciones del Grupo Aeroportuario del Sureste. Los papeles se vendieron por kilo ante el temor de una caída drástica en su precio. La razón es simple: la firma maneja la certeza de que cuanta terminal se realice en la península de Yucatán y demás anexas se hará bajo su férula, lo que contraviene las reglas de equidad y competencia.
Por lo pronto la dependencia no ha señalado si la empresa tendría derecho de participar en el concurso.
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Finalmente la empresa embotelladora Arka cerró la transacción por medio de la cual asumió un porcentaje mayoritario de la firma regional fabricante de botanas Bokados, con opción de incrementarla a 100%. La transacción se anuncia como la primera de la compañía para diversificar sus operaciones de negocios en ramos afines, tras fracasar en su intento de engullirse a la empresa fabricante de alimentos
enlatados y conservas Herdez.
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