Segundo acto: gasto
Incierto aún el resultado de la presión de las cúpulas empresariales para bajar “aunque sea un puntito” el Impuesto de Tasa Única (ITU), la ofensiva del cabildeo se lanza ahora hacia la otra cara de la moneda: el gasto
Desechada por el Congreso la posibilidad de implantar una suerte de Consejo Consultivo Intersecretarial para vigilar el uso correcto de los recursos, la presión apunta hacia una instancia mixta, integrada además por representantes del legislativo y de los propios causantes.
La intención es simple: evitar los tradicionales subejercicios de inicio de año que demoran la derrama hacia la economía, y cancelar, de pasadita, los tradicionales “cochinitos” para enfrentar a favor de la causa partidista los procesos electorales. Ahora que el punto fino habla de racionalizar las partidas; someter a las entidades federativas a esquemas de transparencia y rendición de cuentas, y acotar la posibilidad de desvíos.
De acuerdo al esquema actual, una vez recibidas las partidas, aún cuando estén debidamente etiquetadas para gasto de inversión o programas sociales, las entidades federativas las hacen suyas, con lo que su supervisión queda a cargo de sus propios órganos internos.
¿Se acuerda usted de los choques frontales entre la ex secretaria de Desarrollo Social, Josefina Vázquez Mota, y el ex gobernador de Oaxaca, José Murat, ante la negativa de éste de rendir cuentas? ¿Se acuerda de que en la cresta mayor de la disputa se llegó a solicitar la protección, vía uno y otro decretos del Congreso Local dominado por los priístas?
Ahora que la percepción generalizada es que el gobierno federal, pese a los cacareados programas de austeridad, ha disparado al infinito el gasto corriente. De hecho, 75% de los excedentes petroleros durante el gobierno foxista se fueron hacia el renglón. Estamos hablando de un global de 575 mil millones de pesos.
Más allá, pareciera irracional el que las multimillonarias partidas destinadas a capacitación de los maestros de nivel primario y medio se les entreguen al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, sin que se le exija la posibilidad de supervisión.
¿Quién garantiza que los cursos no apunten hacia prácticas de mapachería electoral en la que al parecer se han vuelto expertos, con posibilidad de vender sus servicios al mejor postor? ¿Quién garantiza que tras el camuflaje no se adoctrine a los mentores para encausar a los educandos hacia la causa del Partido Nueva Alianza, propiedad de la lideresa Elba Esther Gordillo?
Adicionalmente, planteados como ariete para el clientelismo político, hete aquí que los apoyos indiscriminados a la producción del campo han crecido en los últimos cinco años 40%, en tanto la producción de éste sólo lo ha hecho en uno por cuenta.
La correlación, pues, es nula. En otro escenario, los empresarios se quejan de triquiñuelas en las licitaciones públicas que en la práctica encarecen los contratos, en beneficio, claro, de la corrupción.
Adicionalmente, bajo ese mismo marco, agotadas o reducidas al mínimo las reservas permanentes pactadas en los diversos Tratados de Libre Comercio, prácticamente cualquier compra de gobierno cuyo monto sea superior a 3.5 millones o de 144 en obras públicas, debe plantearse vía una licitación internacional.
La exigencia, naturalmente, deja de lado a la mayoría de las empresas nacionales, con énfasis en las pequeñas y medianas.
Por lo pronto, aunque los empresarios comparten la exigencia priísta de dotar de mayores recursos a Petróleos Mexicanos como condición para empujar la reforma fiscal, plantean que ésta si cubra por la vía de una partida especial y no por reducirle la carga fiscal.
Aunque en el papel se trata de lo mismo, es decir de todas maneras el gobierno no podrá hacer uso de unos 85 mil millones de pesos, la primera alternativa permitiría una supervisión más directa del destino de los recursos, en un escenario en que el aparato público, llámese Auditoría Superior de la Federación o Secretaría de la Función Pública, sólo vigila el uno por ciento del gasto público.
Ahora que la condición para la paraestatal sería negociar con el sindicato una reducción drástica de prestaciones y prebendas.
La pinza de las cúpulas.
Balance general
La noticia es que el ex secretario de Hacienda, Pedro Aspe Armella, se integrará en los próximos días a una suerte de Consejo Consultor del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), cuyo propósito es ubicar recetas para reactivar la instancia financiera.
La paradoja de éste es que contando con niveles record de recursos en sus arcas, no tienen ya la clientela de antaño. ¿Se acuerda cuando se formaban colas inmensas para pelear un préstamo?
La designación del ex funcionario, hoy presidente del banco de inversión Protego, se realizó a sugerencia del ex presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Alan Greenspan.
De hecho, éste personalmente lo convenció.
Convertida en manzana de la discordia la ausencia del presidente de la Concamín, Ismael Plascencia, de los trabajos de la Conferencia Internacional del Trabajo celebrada en Ginebra, Suiza, los primeros 15 días de junio, la Coparmex ha iniciado una campaña subterránea contra el organismo cúpula industrial. De lo menos que se tacha a éste es de uso abusivo de los recursos que le otorgó en calidad de viáticos la Secretaría del Trabajo.
Más allá, se acusa al dirigente de haber volado a París con el dinero… y luego desaparecer al encanto de los Campos Elíseos.
Lo cierto es que en la fase previa Plascencia había realizado un largo viaje de vacaciones con su familia, pagado con recursos propios, naturalmente, ubicándose en el Cairo cuando llegó la víspera de su intervención en el evento.
La orden del día lo colocaba como segundo orador de México en la sesión, tras el turno del secretario del Trabajo, Javier Lozano Alarcón.
El caso es que éste se disculpó en el último minuto, lo que obligó a modificar el escenario.
—Ya no tiene caso que vayas —le había dicho el funcionario, consejo que planeó a su vez el jefe de la delegación privada, Jorge A. de Regil.
El problema es que para entonces se había comprado un boleto de Air France con destino a París, para de ahí volar a Ginebra, con un costo de mil 100 dólares. El pasaje no se utilizó. De hecho, ya se solicitó su reembolso. El subsidio otorgado por la Secretaría del Trabajo a la causa empresarial fue de 20 mil dólares, a prorratearse entre Concamín y Coparmex.
A esta última le tocaron 9 mil 843. La rudeza, pues, pareciera innecesaria.
Este mediodía, en la sala Miguel Covarrubias del Centro Cultural Universitario, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) le rendirá un merecido homenaje al desaparecido ex presidente del grupo ICA, Gilberto Borja Navarrete.
El acto, presidido por el rector de la UNAM, Juan Ramón De la Fuente, incluye la develación de una escultura del hombre que construyó obras monumentales de infraestructura al tiempo de
un ejemplo de pundonor, arrojo y humanismo. Bajo su gestión ICA fue la primera firma constructora latinoamericana en ingresar a la Bolsa de Valores de Nueva York.
Presidente del Patronato Universitario, Borja Navarrete le devolvió con creces el legado a su alma mater, promoviendo, entre otras, el Centro para la Innovación Tecnológica y el Centro de Docencia de la Facultad de Ingeniería.
Entre los oradores estarán el actual presidente de ICA, Bernardo Quintana Isaac; su compañero por décadas en la firma, Andrés Conesa, y el hijo único del empresario, Gilberto Borja Suárez.
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Agencia de noticias EL UNIVERSAL
