Vecinos de la colonia Villa Jacarandas se quejan por la falta de áreas verdes y la presencia de un gran lote baldío convertido en tiradero.
Los habitantes de la colonia Villa Jacarandas llevan diez años esperando sus áreas verdes
TORREÓN, COAH.- Canchas convertidas en basureros, lámparas en mal estado y automovilistas conduciendo a exceso de velocidad por la zona escolar, son algunos de los problemas que enfrentan a diario los vecinos de la colonia Villa Jacarandas de Torreón.
Estela, nombre con el cual se identificó una de las amas de casa, manifestó que por más de diez años han esperado la creación de sus áreas verdes, las cuales se localizarían a espaldas de la escuela primara Raúl Isidro Burgos, ubicada sobre la calle Halcones esquina con Cerezos.
“Tenemos muchos años esperándolas pero nadie ha hecho nada”, comenta Estela. Tiempo en el que los vecinos han olvidado estas promesas hechas por las autoridades municipales, prueba de ello es el hecho de que varios vecinos fueron cuestionados sobre este proyecto en donde gran parte de ellos, lo ignoraban.
Lucía, por su parte, mencionó que este gran lote baldío, ahora tomado como un basurero, se ha convertido en criadero de animales ponzoñosos, los cuales llegan a introducirse a los hogares e incluso a la escuela primaria de este sector.
“Se esconden en los rincones de la casa, he sacado varios… es bien peligroso tanto para los niños como para nosotros”, comenta preocupada Lucía.
Aunque la escuela ha realizado varias campañas de limpieza de este terreno, no es suficiente, dicen las vecinas, pues camiones, camionetas y automóviles, llegan hasta el lugar para depositar grandes cantidades de basura y escombro. “Como estamos a pie de carretera les es más fácil tirar de todo”, comenta Estela.
Otro de los problemas que aqueja a los vecinos, es la velocidad a la que circulan la mayoría de los autos por este sector de la colonia, “muchos no respetan los límites de velocidad, ya han ocurrido varios accidentes, sin embargo todo sigue igual”, comenta Estela.
Fue hasta hace un año, cuando agentes de Vialidad se daban cita en esta colonia para controlar el tráfico a la hora de entrada y salida de los alumnos, “pero todo terminó pese a que aún necesitamos de su presencia”, dice Lucía.
Ambas mujeres sugieren a las autoridades municipales, destinar un par de agentes, como antes, para evitar accidentes fatales, además hacerse cargo del gran lote baldío que se encuentra a espaldas del plantel y así terminar con la plaga de alacranes.