Cuatro personas fueron asesinadas y sus cuerpos quedaron calcinados en el interior de un vehículo, cuyos restos se ubicaron en el kilómetro 186 del tramo carretero de cuota que une a los municipios de Magdalena e Imuris, a unos 185 kilómetros al norte de Hermosillo.
El vocero de la Procuraduría General de Justicia del Estado, José Larrinaga Talamante informó que los cadáveres fueron localizados dentro de un vehículo que fue incendiado intencionalmente.
Los cuerpos fueron encontrados dos en la cajuela de un vehículo tipo sedán, Renault, modelo 2004, con placas de Jalisco JLM-3023 y los otros dos en el asiento trasero de la misma unidad.
Indicó que los restos humanos no habían sido identificados debido a que se encontraban totalmente calcinados.
Por otra parte, una persona fue ejecutada y una más resultó herida cuando sujetos armados los atacaron a balazos a la salida del Maxitúnel, a unos 50 metros de avenida Farallón, en Acapulco, Guerrero, reportaron autoridades.
Ambos individuos viajaban a bordo de una camioneta Susuki color plomo, la cual tenía al menos 10 impactos de bala en ambos lados - con los cristales destrozados- y en el parabrisas.
En el lugar, cercado por agentes de la Policía Federal Preventiva, de la Policía Estatal y Municipal, se encontraron 16 casquillos percutidos de armas calibre 45 y .9 milímetros.
De acuerdo con información extraoficial, la persona ejecutada fue identificada como Adelfo Ozuna Solano, y el herido fue trasladado a un hospital privado de este puerto aún con vida.
Insisten policías en aumento salarial
Una marcha que reunió a cerca de medio millar de inconformes, más la advertencia de un paro
generalizado de labores, han dejado las protestas de elementos de la Policía Estatal Preventiva de Puebla (PEP), que desde hace seis días reclaman el mejoramiento de sus condiciones laborales y el aumento en 100% de su salario.
Sin embargo, lo radicalizado de la postura de los uniformados ha provocado que en diversas ocasiones se suspendan las pláticas con funcionarios del Gobierno del estado, que en una primera instancia se negaron a aplicar en la próxima quincena un aumento de 20% en las percepciones de los cerca de 4 mil policías.
A esto se suma que un centenar de policías municipales decidió ayer adherirse al paro de la PEP, aunque en este caso se trató de efectivos que se encontraban en su día de descanso, por lo que fue minimizado por parte de autoridades del Ayuntamiento de Puebla.