El director del Parque Nacional de la región de los Abruzzos (centro de Italia), Aldo Di Benedetto, anunció la muerte de tres osos, de la pequeña colonia que puebla el área, posiblemente por envenenamiento.
El Cuerpo forestal del Estado denunció en un comunicado que "es casi seguro que los osos han fallecido debido a que ingirieron comida envenenada".
Di Benedetto explicó que "es una gran pérdida" ya que esto hará disminuir "el potencial reproductivo" de los osos, cuyo número es ya muy escaso.
Se desconoce el número exacto de osos que viven en este parque natural, pero se calcula que son entre 30 y 50 ejemplares.
La asociación, que también denunció la reciente muerte de dos lobos, anunció que dará diez mil euros a quien denuncie ante la justicia a quiénes han sido los responsables.
Uno de los plantígrados muerto es el "oso Bernardo", de nueve años y 160 kilos, que era muy conocido debido a que se acercaba a las localidades de esta zona con frecuencia.
Bernardo se había convertido en un atractivo del parque natural e, incluso, una admiradora estadounidense donó el año pasado un millón de euros para su cuidado.
Los agentes del parque se dieron cuenta de que Bernardo no daba señales de vida desde hace tiempo, gracias a que contaba con un sistema de localización.
Los otros dos osos muertos eran la compañera de Bernardo, de cerca de cuatro años y en edad reproductiva, y que yacía junto a él y otro oso más joven.
El cuerpo forestal y los investigadores del Departamento de Biología Animal de la Universidad La Sapienza de Roma practicarán autopsias a los plantígrados para determinar las causas de sus muertes.