El PRD endureció ayer su posición hacia el Primer Informe de Gobierno del presidente Felipe Calderón y dejó claro que bajo ninguna circunstancia reconocerá su mandato y que no habrá diálogo ni negociación alguna con él.
Ocho de los principales líderes perredistas presentaron los resolutivos de su X Congreso Nacional en torno a sus documentos básicos en los que rechazan el diálogo, la propuesta del Gobierno Federal en materia fiscal y el debate en el Congreso propuesto por el mandatario.
Las fracciones legislativas del PRD se reunirán con la Dirección Nacional el próximo 24 y 25 de agosto en Morelia, Michoacán, a fin de definir postura.
Guadalupe Acosta Naranjo, secretario general del PRD, leyó un documento en torno a los resolutivos del Congreso perredista flanqueado por los coordinadores parlamentarios en la Cámara de Diputados, Javier González Garza y en el Senado, Carlos Navarrete.
Además de Jesús Ortega –cabeza de Nueva Izquierda, la corriente perredista más poderosa-, Alejandro Encinas, Saúl Escobar, Rafael Hernández y Ricardo Ruiz.
En el texto de dos cuartillas Acosta Naranjo no dedicó una palabra a la confrontación que se generó el último día de los trabajos del Congreso Nacional con expresiones políticas agrupadas en el Frente Político de Izquierda.
Minutos después, este frente –polo que aglutina a varias corrientes del PRD, entre ellas la bejaranista Izquierda Democrática Nacional- se desistió de impugnar ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación las resoluciones del Congreso Nacional de este organismo político.
