La gran mayoría de las calles del sur de la ciudad de Matamoros, Coahuila, carecen de pavimento y otros servicios, como el drenaje.
La Graciela Fernández de Onofre e Ignacio Zaragoza semejan más a un poblado del medio rural
POR PRIMITIVO GONZÁLEZ
EL SIGLO DE TORREÓN
MATAMOROS, COAH.- Las colonias Graciela Fernández de Onofre e Ignacio Zaragoza, localizadas en el extremo sur de la ciudad, son de las que presentan mayores carencias de servicios públicos y semejan más a un poblado del medio rural que a la ciudad.
Separadas sólo por la prolongación de la calzada Lázaro Cárdenas, las polvorientas calles de las dos colonias se asemejan entre sí por las mismas carencias.
A pesar que la colonia Ignacio Zaragoza tiene más de 30 años, todavía no cuenta con pavimento, de tal forma que cuando llueve se tornan intransitables por el lodo que inunda todas las arterias y cuando el viento sopla fuerte, las polvaredas impiden la visibilidad y la tierra se mete por todos lados a las viviendas.
Casi todas las casas de la colonia Graciela Onofre de Contreras, nombrada así en honor de la esposa del alcalde Raúl Onofre Contreras, hace unos 12 años, no cuentan con servicio de drenaje y el servicio de agua potable es deficiente.
En algunas partes de la colonia, dicen los vecinos, no hay alumbrado público y por las noches está muy oscuro y peligroso para los mismos habitantes.
Más que formar parte de la ciudad, estas colonias parecen comunidades rurales que no han alcanzado los beneficios del área urbana, pues por lo general todos los alcaldes miran sólo hacia el norte de la ciudad y el municipio, dicen los quejosos.
La colonia Carolinas, ubicada al extremo oriente de la ciudad, se encuentra en condiciones similares, con calles sin pavimento, algunas viviendas sin drenaje y fallas en el suministro de alumbrado público.
Los colonos esperan que las autoridades municipales se acuerden de la parte sur de la ciudad y en los planes de drenaje y pavimentación, se acuerden de esas colonias que han permanecido en el olvido por muchos años.
