¿Han escuchado ustedes un rumor, como tantos hay, que Disneylandia va a poner una sucursal en nuestra región y que por eso últimamente se han construido tantísimos hoteles? No me digan que no es cierto. Las noticias cotidianas de la prensa dicen lo contrario y a las pruebas me remito:
El mundo de Disney, de la fantasía y de la imaginación ya está aquí. Ayer o antier publicaron en el periódico la nueva opción para hacer los subterráneos en el nudo Mixteco. ¿Qué acaso no es del país de las fantasías que se muestre ineptitud tan obvia? El hecho de andar jugando al atínale, al ver si ahora sí, y que la ciudadanía no proteste, es del país de las fantasías. Yo sin saber nada de ingeniería me hago dos preguntas: primero, ¿por qué el nudo Mixteco está de subida, (o de bajada según vayas o vengas)? ¿Qué existe debajo de esa joroba? Segundo, el tajo cruza de poniente a oriente precisamente ese lugar. ¿Qué ese tajo no estorba a los túneles? ¡¡¡Disneylandia!!!
Pero sí, el país de las fantasías tiene presencia en la región. Hoy jueves sale la noticia de que el fin se le va a dar una solución al centro histórico de la ciudad. No cabe duda de que podemos confiar en quienes se han resuelto a hacerlo. La metodología es la misma que han tratado de utilizar los últimos nueve o doce años. (Tono de discurso demagógico) se hablará con las fuerzas activas de la ciudad para que acepten, el comercio informal a ser reubicado, el de los sexoservidoras y servidores también a ser reubicados, y se va a decidir dónde hacer nuevos andadores (como el de la Cepeda) lo mesmísimo que desde hace años nos vienen diciendo y que a final de cuentas no se ha convertido una acción contundente que provoque el cambio. ¡¡¡Disneylandia!!!
Pero si quieres saber más del mundo de Disney, otra noticia. ¿Se acuerdan de los cien millones que se iban a aportar para las fiestas del centenario? Se han dado diez, quedan noventa pendientes que según dicen se irán dando (como los puentes) una vez que sean necesarios. Se cumple un mes del año y aún andan que así que asá. La nave parece navegar sin un buen timonel; eso sí, por un mar lleno de palabras y buenos deseos, y sobre todo con nubes espectaculares donde sobresale las fotografías de nuestros navegantes que dicen que hacen y han de hacer, no lo dudo, pero aún están muy lejos de lo que debieran de hacer. Cien años, se dice fácil, cumplir cien años. ¡¡¡Disneylandia!!!
A todo esto de los cien años, ¿por qué tanto desconocimiento a Eppen que fue la persona a la que se le ocurrió hacer pasar el ferrocarril por este entorno tan desierto y el que hizo la promoción para que doña Luisa en quiebra, bancarrota y sin ideas, permitiese construir una estación en el caso de uno de los ranchos, hipotecados, para que añitos después hubiese equivocado las medidas que resultaron en nuestras anchísimas calles)? Porque estamos en ¡¡¡Disneylandia!!!
Sí, sólo así te explican que en las estaciones culturales o universitarias le den la preferencia a la música light (se felicita a la camerana por los conciertos didácticos. Nomás figúrense ustedes lo que se pudiera obtener si una estación de radio se pusiera a su disposición. Correríamos el peligro de dejar de ser ¡¡¡Disneylandia!!!
Hablando de; mientras que esto escribo escucho Scherezade op 35 de Rimsky-Korssakof y me refiero a ello porque una de estas estaciones gusta de la música oriental o Palestina y ahí como no queriendo la cosa la pudiera introducir. El ambiente es el mismo.
El notición fenomenal de la semana fue Fox y eso que no vive en Torreón pero sí participa en la incultura nacional. Bastante se ha comentado. Teniendo la lana que tienen los políticos deberían de contratar asesores culturales que sepan disfrutar de la tía julia y el escribidor (por lo menos que hayan visto la película) o que en sus años mozos se hayan robado de una de cristal, los cachorros (confieso haber pecado) para que no mantengamos este ridículo nacional Disneydantesco.
Auméntele nuestro bajísimo nivel académico, que no existe rescate de nuestra historia literaria y que los días son grises, fríos, llenos de mallas, anuncios luminosos, bares, antros, y demás. ¡¡¡Disneylandia!!! Caótica pero a fin de cuentas... esperen, ahora que recuerdo, el aprendiz de brujo, si ésa también es tocable en nuestras estaciones de radio y fantasía, la música de fantasía, si yo sabía bien que hasta Disney a veces usaba de lo bueno.
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