Hoy jueves han salido en el periódico dos notas acerca de los libros; uno de Miguel Canseco y otro de la Iberoamericana; uno con respecto al vicio de la lectura y otro en relación a la próxima feria del libro.
El vicio de leer, para mí, es más productivo que otros vicios. El consumismo, como dice Canseco, conforma modas que muchas veces caen fuera de la racionalidad y si todo mundo los consume es porque, sin que cueste tanto esfuerzo, la imitación te da relevancia. Pongo por ejemplo los I Pots (si no se escribe así es lo de menos). Este aparatito tan pequeño, dicen que contiene toda la música que tú quieras. A la hora de preguntar sobre la alimentación, te hacen referencia al Internet o a algún otro modo, en relación directa con la piratería, algunos de ellos.
La moda es traer audífonos para estar oyendo música todo el santo día. ¿Qué tipo de música? Conformistamente diremos que la juvenil, porque no creo que los padres estén muy preocupados en el cultivo del gusto musical de sus hijos, y si la otra referencia son las escuelas, les diré que es un nuevo enemigo que entra a las aulas de clases que interfiere con la cátedra. En nuestros tiempos sería tanto como haber llevado los radios de pilas y encenderlos a la hora que el maestro Rosales nos daba Álgebra o nos ponía a leer al Quijote.
La modernidad del aparatito es como la modernidad de los celulares, todo mundo anda con ellos porque para todo mundo se le ha vuelto indispensable. La mayoría de ese mundo, no tiene muchas veces para comprar la tarjeta con tiempo y nada más lo usa para recibir llamadas, (que otro sea el tonto que gaste), pero ya estás en la moda y ya estás localizable. Un chamaco de 14 a 18 años, ¿para qué quiere estar localizable? ¿A la altura de la preocupación de mamá y papá? No hombre, acá la onda del celular, hablarle a los cuates, quihubo qué haces, nada y tú nada. ¿Cómo estuvo la clase? Pos sepa, me la pasé oyendo a los Tigres del Norte, a ese maistro ni se le entiende.
Ahora que si uno compra libros, puede obtener la capacidad de abrir su conciencia y analizar un poco la realidad social que te rodea. Descubres, en lecturas como las de Huxley, Owen, Ray Bravury, que las nuevas tecnologías nos tienen inmersos en los peligros de los mundos felices donde el soma es el distractor alienante que ejerce un control sobre las vidas de los individuos que se aíslan cada vez más, (los audífonos aíslan), y de este modo es más efectivo los sistemas de dominación social.
Posiblemente todo mundo pega el grito en el cielo por el precio de las tortillas; pero como a la clase media no le pueden mucho las tortillas, hace ¡Ah! Se acomoda el audífono y sigue adelante. Toma su celular para ver que está haciendo Petrita y si usted quiere certificarlo, pase por donde se pagan los servicios del inalámbrico, parece como si regalaran.
Soy de los que se las puede vivir sin I Pot ni Celular. (Para eso tengo teléfono en mi casa y hay teléfono en la oficina). Y no los tengo porque carezco de la economía para mantenerlos. (Algunos los tienen pero no para la tarjeta, lo cual se me hace realmente estúpido). Lo poco que tengo lo malgasto en libros, (gracias a los españoles puedo obtener un buen libro en 60 pesos). Si me sobra en CD (buscando, buscando, encuentras y como sólo puedo escuchar música cuando escribo, tengo mi reproductor. Si algo no encuentro lo bajo del Internet (perdón por los derechos).
Eso también, para los libros no hay que esperar las grandes ferias que por lo general manejan libros de texto o libros raros. Conque lleguen colecciones como la de Sepan Cuántos, Byblos, Punto de Lectura u otras similares, con títulos atractivos es más que suficiente. (Últimamente me ha dado una mareada de historia universal: La Serie de los Reyes Malditos, Marco Polo, Ladrones de Tinta que trata sobre Avellaneda y Cervantes y sobre todo los usos y costumbres de ese tiempo, hay mucho más, Alejandro, Los Reyes Católicos, muchísimo más).
También soy comprador compulsivo de DVD porque estoy formando una videoteca en la escuela donde doy clases para que los muchachos tengan acceso a un acervo cinematográfico, y no sólo cinematográfico, sino documentalístico, operístico, y todos los demás ísticos. Las nuevas tecas tienen que ser visuales. Como este tipo de material puede ser gratamente compartido, es mejor que sean sociales, que estén en escuelas o en instituciones. Mi material es clásico, nada que ver con las casas de renta; intento ser selectivo, el fin es didáctico. (Buena la serie de la BBC ?Los días que conmovieron al mundo? que pone a disposición El Siglo de Torreón. Ya le eché el ojo). JOLHE.
