SOMBRERETE, ZAC.- Las personas con capacidades diferentes son un ejemplo de virtudes y fortaleza, pues hay quienes con su entereza y ganas de vivir dan ejemplo de que dignificación a los que no valoran la existencia, comentó Pedro Núñez Velázquez.
El Comisionado de Personas con Capacidades Diferentes (CEISD), dependiente del DIF Municipal, señaló que un claro ejemplo de que la adversidad no es obstáculo para seguir adelante es el de Agustín Martínez, de 43 años, quien a pesar de perder sus extremidades inferiores en un accidente de trabajo ocurrido en la Mina de Tocayos en 1984, hoy al paso de los años es una persona útil a la sociedad y se desarrolla como albañil para llevar sustento a su familia.
De ahí que el CEISD esté atento a esta persona, para que en recompensa a su tesón reciba los beneficios que el DIF promueve para las personas con capacidades diferentes.
De esta forma, Núñez Velázquez, platicó que la semana anterior se hizo efectiva la entrega de cuatro sillas de ruedas a igual número de personas que viven en comunidades del municipio de Sombrerete, vehículo que servirá para dar una mejor calidad de vida.
Aparte de Agustín Martínez, los beneficiados fueron Rogelio Fabela Zamarripa, de 22 años de edad, quien quedó parapléjico al vivir un terrible accidente automovilístico; Brenda Valle Herrera, de 20 años, quien padece parálisis cerebral; otra beneficiaria es María de Jesús Rodarte Zapata, de 76 años de edad, quien también sobrevive en difícil condición por enfermedades articulares degenerativas.
Todas estas personas que han sido apoyadas radican en la cabecera y zona rural del municipio de Sombrerete, concluyó el entrevistado.
