El astro del Barcelona, Ronaldinho, formó parte del equipo que hizo el ridículo ante el modesto club Getafe, con quienes perdieron por 4-0 en el juego de vuelta de la Copa del Rey. (AP)
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BARCELONA, ESPAÑA.- Con rostros serios, los jugadores de FC Barcelona realizaron ayer su entrenamiento con el peso de la estrepitosa caída ante Getafe de Madrid por 4-0, y quedar sin oportunidad para disputar la Copa del Rey.
Ante decenas de seguidores que acudieron a las instalaciones de La Masía, la palabra "vergüenza" fue la más escuchada y más al fondo surgieron abucheos, los cuales no cesaron buena parte del tiempo.
Los jugadores, junto con el técnico Frank Rijkaard saltaron a la cancha, junto al Camp Nou, luego de reunirse con el presidente del club azulgrana, Joan Laporta.
Varios aficionados que acudieron a La Masía no ocultaron su malestar ante la mala imagen mostrada por el cuadro "culé" el jueves en el Coliseum Alfonso Pérez, donde fue arrasado por Getafe.
Los fans del vigente campeón de España y de Europa increparon a gritos a los jugadores y pidieron "mano dura" a Rijkaard para exigir más rendimiento y "sudor" a sus hombres.
El máximo dirigente barcelonista se reunió ayer de forma excepcional con los futbolistas blaugranas en el vestuario, donde platicó con ellos durante casi media hora.
Laporta quiso abordar con los jugadores el monumental fracaso que supuso su derrota por 4-0 ante el Getafe en la vuelta de semifinales de Copa del Rey, luego de ganar antes 5-2.
En la sesión, los únicos ausentes fueron el zaguero mexicano Rafael Márquez y el centrocampista brasileño Thiago Motta, quienes se recuperan de sus respectivas lesiones.
Por su parte, el portugués Anderson Luis de Sousa "Deco" pudo trabajar sobre la cancha por segundo día consecutivo, una vez superado su esguince de tobillo.
Deco podría volver a la lista de convocados del Barza ante Betis de Sevilla este domingo en Liga, donde los "culés" tendrán que compensar a su afición por la decepción en la Copa.
El torneo casero es el único título al que aspira el cuadro catalán en esta campaña, tras perder la Supercopa de Europa, la final del Mundial de clubes, caer en octavos de Champions League y perder el partido para ir a la final de la Copa del Rey de España.
