El espíritu emprendedor es un valor que escasea en las universidades a pesar de los gastos que algunas instituciones educativas realizan para mantener a sus incubadoras de empresas.
Se estima que solamente entre uno y tres por ciento de los estudiantes de nivel superior están interesados en emprender su propio negocio, a pesar de los apoyos que brindan las incubadoras universitarias a sus propios alumnos, según confirmaron autoridades de la Universidad Panamericana (UP) y la Universidad Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP).
Antonio Castro, director de la Escuela de Ciencias Empresariales de la UP, reconoció que las instituciones académicas no han dado resultados en la incubación de negocios, porque su principal objetivo no es crear nuevas empresas, sino formar profesionistas.
?De cada diez alumnos si llegan dos a emprender, podemos decir que es mucho y de ellos podemos decir que son menos los que tienen éxito?, dijo Castro.
Destacó que las incubadoras de negocios universitarias han fracasado en su objetivo de crear nuevas empresas, pues la mayoría de los proyectos que ?incuban? se queda en un trabajo para obtener una calificación.
Aideé Ortiz, directora de la Incubadora de Negocios UNINCUBE de la UPAEP, reveló que anualmente el gasto operativo de esta incubadora es de hasta 800 mil pesos, pero sólo uno por ciento de los proyectos que reciben son de alumnos universitarios.
?Lo primero que les preguntamos a los alumnos es si estarían dispuestos a dejar la carrera, su vida personal y social, además de sus diversiones, por abrir su propia empresa y obviamente la respuesta casi siempre es no?, refirió Ortiz.
?La prioridad para ellos no es ser empresarios, sino terminar la escuela, viajar, trabajar y a lo mejor después crear una empresa propia?, dijo Ortiz.
