La esquizofrenia afecta a jóvenes de entre 15 y 25 años. Y de cada 100 casos de esquizofrénicos, más del 60 porciento presenta un intento suicida.
Esta enfermedad mental es grave si no se atiende debidamente, ataca a personas de cualquier edad, pero son muchos los jóvenes que la sufren.
La esquizofrenia es una enfermedad que afecta a decenas de miles de mexicanos, mucha gente piensa que se trata de un mal que únicamente hace que sus víctimas escuchen voces o hablen solas, pero lo cierto es que va más allá, pues los afectados viven en un mundo en el cual todo se complica y corren el riesgo de suicidarse.
Es un problema social, ya que después de la depresión, la esquizofrenia ocupa el segundo lugar de prevalencia entre los males mentales, explica el doctor José Luis Vázquez Ramírez.
Destaca que los servicios de siquiatría del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) tienen el reto de prevenir cada día más pacientes esquizofrénicos, al ser un problema más común de lo que se pudiera pensarse.
Los padres deben tomar nota y estar atentos ante cambios evidentes en la conducta de sus hijos, actitudes que les llevan a rebeldía, indisciplina, aislamiento, a ser poco comunicativos. Estos síntomas pueden ser una alerta.
La esquizofrenia afecta a jóvenes de entre 15 y 25 años. Y lo más grave de todo es que de cada 100 casos de esquizofrénicos, más del 60 porciento presenta un intento suicida.
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) atiende a más de 70 mil enfermos con esquizofrenia.
Llama la atención sobre que son tres las barreras que enfrentan los familiares para no llevar a su hijo a recibir atención médica: ignorancia, negación y miedo a acudir al siquiatra.
El gran riesgo que corren al no buscar ayuda médica es que quienes padecen el mal tratan de mitigar esas alucinaciones consumiendo alcohol o drogas, y esto sólo empeora la enfermedad y las tendencias suicidas y homicidas aumentan.
Hay solución
El doctor Vázquez Ramírez, especialista del Hospital Psiquiátrico Héctor Tovar Acosta, insiste en que los más afectados por este padecimiento son los jóvenes, de ahí que los padres de familia deben mantenerse bien atentos ante problemas como calificaciones bajas, rechazo a la disciplina y conflictos con la autoridad.
Si los muchachos empiezan a desarrollar su propio mundo, descuidan su imagen personal, llevan una agitada vida nocturna y son poco hogareños, es hora de ponerse en guardia.
Para actuar a tiempo se debe cuidar la presencia de alucinaciones e ideas delirantes de persecución, hábitos alimenticios cambiantes y si sólo eligen lo que está perfectamente sellado por miedo a ser envenenados o ronda la idea del suicidio, una situación que afecta a la familia que muchas veces atribuye estos cambios a la "crisis de la adolescencia".
El Instituto Mexicano del Seguro Social tiene el Programa de Hospital Parcial para la Rehabilitación Integral del Paciente Esquizofrénico, en el cual siquiatras, sicólogos, enfermeras y trabajadoras dan atención multidisciplinaria al enfermo, dentro y fuera de la clínica.
El programa tiene ya tres generaciones de pacientes que tienen la posibilidad de hacer una vida normal, con buena calidad, control de los síntomas e incluso convivencia familiar.
De acuerdo con diferentes estadísticas, el paciente con esquizofrenia tiene la tasa más alta de riesgo suicida, en comparación con las demás enfermedades de tipo mental. Vázquez Ramírez dice que a diferencia de las personas depresivas, el esquizofrénico sufre de alucinaciones y delirios que son un peligro para él y quienes lo rodean.