Investigadores de la Universidad de California han fechado la etapa más antigua de la formación del Sistema Solar. (Archivo)
Hace 4 mil 568 millones de años microscópicas partículas de polvo interestelar se juntaron para formar trozos de roca del tamaño de una montaña, dando paso a lo que conocemos como Sistema Solar, según los especialistas de la materia.
Investigadores de la Universidad de California han fechado la etapa más antigua de la formación del Sistema Solar, cuando microscópicas partículas de polvo interestelar se juntaron para formar trozos de roca del tamaño de una montaña hace cuatro mil 568 millones de años, con un rango de tolerancia de poco más de 2 millones de años (2.80 millones de años).
Los investigadores Frederic Moynier, Qing - zhu Yin y Benjamin Jacobsen establecieron las fechas analizando un tipo de meteorito, denominado condrita carbonácea, que representa el más antiguo material remanente de la formación del Sistema Solar.
La física y procesos de esta primera etapa de formación planetaria no se conocen bien, dijo Yin, por lo tanto, poner limites de tiempo en el proceso debería ayudar a orientar los modelos físicos que se podrían utilizar para explicarlos.
En la segunda etapa, el cuerpo del tamaño de una montaña creció rápidamente hasta tener la masa equivalente a 20 planetas Marte.
En la tercera y última etapa, estos pequeños planetas chocaron unos con otros en una serie de gigantescas colisiones que dieron origen a los planetas que conocemos hoy en día. Las fechas de esas etapas están bien establecidas.
Mensajeros del tiempo
Las condritas carbonáceas se componen de glóbulos de silicio y gránulos de metales incrustados en partes oscuras, ricas en sustancias orgánicas de polvo interestelar (núcleo).
El núcleo es relativamente rico en manganeso y los glóbulos son ricos en cromo.
Buscando en una serie de meteoritos recolectados en la Tierra, los investigadores encontraron una relación directa entre la proporción de manganeso con respecto al cromo, el tamaño del núcleo de los meteoritos y la cantidad de cromo 53.
Estos meteoritos nunca llegaron a ser lo suficientemente grandes como para calentarse por desintegración radiactiva, por lo que nunca se han fundido, son "sedimentos cósmicos", afirmó Yin.