El Siglo de Durango
Inconformidad por parte de enfermeras del Hospital General de Zona Uno del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), ante una presión laboral por nimiedades mientras que se descuidan aspectos realmente importantes y hasta básicos, como lo es dotar de jabón en los pisos para que tanto el personal, como los pacientes, puedan lavarse sus manos.
Según testimonios de enfermeras del nosocomio, se han adoptado medidas que van en contra de ellas aun y cuando se tratan de cosas mínimas y sin importancia pero en contraparte, las autoridades del Instituto no se fijan en aspectos tales como brindarles los elementos necesarios para su función.
A veces, narran, ni siquiera hay los suficientes cubre bocas para las enfermeras y tienen que solicitarlas en otros pisos. Tampoco tienen la cinta adhesiva que se requiere pues la utilizan para clasificar los medicamentos inyectables. Y sobre al jabón, hace ya algunos días que se los dan ?a cuentagotas?.
Pero entre tanto que se descuida el otorgamiento de insumos básicos para que las enfermeras atiendan a los derechohabientes que se encuentran internados, se ha implementado un riguroso control del uniforme.
Ahora, se exige que no se salga de la norma establecida en los estatutos, obligando que se porten los zapatos y la cofia reglamentarias.
Conforme se dio a conocer, el trabajo de la enfermera es de constante movimiento, por eso, optan por vestirse de la manera más cómoda posible sin descuidar su presentación. Algunas de ellas compran calzado especial y no llevan el que les da la propia Institución pues les resulta fatigador.
Aunque el IMSS tiene la obligación de dotar de uniformes tres veces al año, la realidad es que no son tan de buena calidad y por lo general, tienen errores en las tallas por lo que es difícil que les queden a la medida.
Pese a los argumentos que han brindado las enfermeras para que se muestre flexibilidad en aspectos que no son determinantes para la atención a los pacientes y que mejor se enfoquen los esfuerzos en otras áreas básicas, afirman que no han recibido una respuesta positiva por parte de las autoridades delegacionales.
Ya les han dicho que aquella que no porte su uniforme se hará acreedora a una nota de demérito u otra sanción. La inconformidad es que mientras a ellas se les acosa, prácticamente se deja de lado lo que hacen los médicos, ya que muchos ni siquiera respetan las áreas en donde se supone que no deben utilizar el uniforme quirúrgico.
También están inconformes porque por disposiciones centrales, se les limita para hacer uso del denominado ?Plan Piloto?, el cual consiste en que si un trabajador va a faltar puede pagar de su bolsa a otro empleado para que lo supla.
Con esto, aseveraron, se había disminuido considerablemente el ausentismo en el nosocomio, sin embargo, ahora sólo pueden hacer uso de tres planes piloto al mes pero con muchas condicionantes. Dicha situación es preocupante porque es bien sabido que con tan sólo una persona que falte en cualquier turno, el trabajo para quienes sí asisten se acumula.
Los problemas de siempre
El IMSS arrastra una crisis de muchos años.
-El delegado estatal del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Rogelio Alonso Vizcarra, reconoció hace algunos días que existe déficit de especialistas en Durango.
-Esto ocasiona que se tengan que reprogramarse las cirugías que se realizan en los diferentes centros hospitalarios de este organismo.
-Comentó que ya se buscan algunas alternativas como ofrecer dobles plazas, ya que compiten las instituciones públicas con las privadas en cuanto a lo que perciben los profesionales de la medicina que cuentan con una especialidad.
-Dijo que esta problemática es real y se presenta en el ámbito nacional, ya que las escuelas producen muy pocos médicos con especialidad; faltan muchos, y no se diga en lugares pequeños como Durango, destacó.
FUENTE: Investigación de El Siglo de Durango.