Querer siempre estar joven y bella, puede llevar a las personas a sufrir peligros, debido a que recurren a tratamientos que perjudican su salud.
Pensar en burlar al tiempo puede ser una aventura riesgosa, ya que existen miles de productos y procedimientos que prometen mantener a las personas jovenes, pero lo que hacen es provocar daños secundarios.
El dios Cronos es implacable y nada lo detiene, y aun cuando existen tratamientos científicos que ayudan a conservar sana la piel y el organismo, a lucir y sentirse mejor, los años cobran una factura natural que todo mundo debe pagar. Por eso hay que mantenerse alerta ante las ofertas de tratamientos revolucionarios, casi mágicos, que parecen ofrecer la fuente de la eterna juventud.
El director médico del Hospital de Infectología del Centro Médico Nacional La Raza, Manuel Pacheco Ruelas, lanzó un llamado de alerta ante la creciente oferta de la medicina hiperbárica como tratamiento estético y para "rejuvenecer". La gente, dijo, no se debe dejar engañar por quienes prometen tratamientos revolucionarios, ya que si bien es cierto que brindan algunos efectos benéficos, también puede producir daños secundarios severos.
Hay que comenzar por señalar que el manejo de esta tecnología requiere que la presión atmosférica y el oxígeno se administren de acuerdo a las necesidades de cada persona, en caso contrario -afirmó puede causar daño al oído (barotrauma), lesionar la retina ocular, intoxicación cerebral por la oxigenación, de la cual deriva confusión, letargo y somnolencia. Esto último, agregó, puede originar una situación en la cual el paciente experimente fobias a lugares cerrados (claustrofobia) y comience a sentirse mal dentro de la cámara, con ataques de taquicardia y ansiedad.
Pacheco Ruelas, especialista del IMSS, dijo que la cámara tiene usos científicos benéficos:
- Alivio a quienes padecen infecciones de tejido blando: piel, tejido adiposo, músculo y rostro.
- Ayuda en la cicatrización de heridas y úlceras, causados por diabetes, manejo de injertos de piel comprometidos.
- Auxilia en tratamiento de enfermedades del hueso (osteomielitis, por ejemplo) y abscesos cerebrales, patologías que llegan a poner en riesgo la vida del paciente.
Pero hay personas que quieren dar un uso a las cámaras hiperbáricas con fines estéticos, y, afirma el experto: "La realidad es que hay algo de charlatanería, es cierto que de alguna forma sí puede beneficiar la piel, puede beneficiar la circulación general, pero esto es secundario, lo que nos interesa es que el paciente se cure de enfermedades complejas y que lleguen a tener una buena calidad de vida".
El engaño alcanza campos patológicos, pues añadió que hay casos en que la ofrecen como cura para la diabetes y/o el cáncer, "lo cual es falso, pues no está establecido este tipo de tratamientos como alternativa de curación". Destacó el especialista que si el deseo de el o la paciente es hacer uso de la medicina hiperbárica, lo recomendable es que sea en un establecimiento serio y que cumpla con todas las normas y lineamientos establecidos.
Explicó que con la transición epidemiológica por el aumento en la expectativa de vida y un mayor número de enfermedades crónico-degenerativas y neoplásicas, más población con diabetes mellitus tipo dos y un debilitamiento del sistema inmune de estos pacientes, hay mayor contacto de las personas con los procesos infecciosos.
De hecho, de los usuarios actuales de la cámara hiperbárica en el instituto, 90 por ciento es diabético, apuntó.
