El alcalde de París los proclamó marido y mujer, pero Eva Longoria y Tony Parker prosiguieron un día después con las ceremonias de casamiento. (Fotografía de AP)
Bajo los rumores de haber vendido la exclusividad Eva Longoria y Tony Parker se dan el sí en un palacio francés
PARÍS, FRANCIA.- La actriz estadounidense de origen mexicano Eva Longoria y el baloncestista francés Tony Parker celebraron su boda religiosa ayer en una de las iglesias de París con más solera real en medio de estrictas medidas para proteger la exclusiva que han vendido a una revista.
Longoria llegó a media tarde a la iglesia Saint-Germain l’Auxerrois, conocida como la capilla de los reyes de Francia, a dos pasos del palacio del Louvre, pero no vestida de novia, y los cientos de curiosos y de fotógrafos que se habían apostado en las inmediaciones quedaron decepcionados y lo hicieron manifiesto con abucheos.
Se trataba de preservar la confidencialidad de su imagen, vestida con el traje escogido de la diseñadora francesa Monique L’Huillier, que como el resto de los elementos de la ceremonia y de la fiesta celebrada por la noche en el palacio de Vaux le Vicomte, en las afueras de París, se ha vendido en exclusiva al semanario “Ok”, según los rumores, por dos millones de dólares.
Se habían extendido varias lonas grises para preservar al máximo esa confidencialidad a la llegada del novio, estrella de los San Antonio Spurs, y de los invitados, que se introdujeron rápidamente en el edificio religioso desde los autobuses y furgones de los que fueron desembarcando.
El dispositivo de seguridad para evitar indiscreciones estuvo formado, en su parte visible, por ocho autobuses de antidisturbios.
Una de las pocas informaciones que habían filtrado de la ceremonia es que el anillo de bodas de la famosa ‘Gabrielle Solis’ de la serie televisiva Esposas Desesperadas tiene 27 diamantes.
Eva Longoria (32 años) y Tony Parker (25), que el viernes fueron casados por lo civil por el alcalde de París, Bertrand Delanoe, reunieron a sus invitados en Vaux le Vicomte, una joya del patrimonio del Siglo XVII de propiedad privada a una cincuentena de kilómetros de París.
La organizadora del enlace, Mindy Weiss, había explicado que la actriz quería “una boda romántica, como en un cuento de hadas” y de ahí la elección de uno de los palacios más fastuosos de Francia, cuyo propietario Jean-Charles de Vogüe, no ha dudado en cerrarlo al público temporalmente para acoger un acontecimiento que como él mismo ha dicho no se organiza más que una vez cada diez años”.
Si los dos novios habían elegido la fecha de hoy para buscar la supuesta buena suerte de la fecha (el 7/7/07 es objeto de múltiples supersticiones), lo cierto es que Vaux le Vicomte encierra un capítulo oscuro al inicio de su historia.
Su primer propietario, el superintendente de finanzas de Luis XIV, Nicolas Fouquet, tras invitar al monarca a la inauguración de Vaux le Vicomte el 17 de agosto de 1661, fue depuesto de su cargo unos días después y encarcelado de por vida por el “rey Sol”, aparentemente por la envidia de que un súbdito pudiera tener un palacio de esa categoría, y mejor que el suyo de Fontainebleau.
El hecho es que Luis XIV encargó al mismo arquitecto de Vaux le Vicomte, André Le Nôtre, que le construyera un palacio más deslumbrante, el de Versalles.
Comparten anécdotas de Eva Longoria
Creció en una casa pequeña, marcada con el número 4950 en la calle Dodd de esta ciudad texana, pero tuvo la disciplina y ambición, a decir de sus vecinos y amigos, para convertirse en una estrella.
Hoy, gracias a su papel en la serie de televisión Desperate Housewives, la vida de Eva Longoria es otra: lujos, fama, contratos millonarios y una residencia en Hollywood Hills valuada en 3.8 millones de dólares. Pero su barrio en Corpus Christi, todavía la recuerda.
A diferencia de Wisteria Lane, donde sus vecinas son Susan, Lynette, Bree y Edie, en la calle Dodd radican parejas jóvenes y otras ya maduras; muchos desconocen que aquí creció la estrella de televisión.
El hogar que habitó está prácticamente igual, salvo por unos juegos en el jardín que antes no tenía y las señales de deterioro que deja el paso del tiempo.
“Eva tiene que haber nacido en esa casa”, dice Barbara Long, quien vive en este sector desde hace 40 años, “Nosotros nos cambiamos porque llegaron ellos y la compraron, pero ya la vendieron”.
Ahora la ex casa de los Longoria es habitada por Gloria Mondragón y su esposo, quienes rentan la propiedad desde hace cuatro años (según el registro de propiedad de Corpus Christi, la residencia fue vendida por los papás de la texana el 31 de julio del 2000, en 10 mil dólares).
“Sabemos que aquí vivió ella porque le siguen llegando cartas”, afirma Mondragón, quien ya se acostumbró al hecho de que algunas personas pasan despacio frente a su casa, quizá porque saben que ahí vivió una famosa de Hollywood.
De plebeya a princesa
A diferencia de la Cenicienta, a esta bella Eva Longoria no la rescató un príncipe: su éxito tiene más que ver con el de cualquier mujer de clase media y padres trabajadores.
De hecho, durante un tiempo Eva fue instructora de aeróbics en la Universidad de Kingsville para ayudarse a pagar sus estudios.
“Yo sabía que ella venía de un barrio de Corpus, que sus papás no tenían todo el dinero para darle todo. Vestía muy bien, pero no eran marcas muy caras, no en ese tiempo”, comenta Roxana Hunt, amiga de la actriz durante su época universitaria, que inició en 1993.
A pesar de que su atractivo físico la hizo destacar siempre, se le dificultó entrar en el mundo del modelaje por ser bajita (1.55 metros). Pero nunca desertó.
“Cuando se proponía algo, lo lograba. Era muy determinada, muy disciplinada y ambiciosa, pero no con malicia. Era muy buena gente, no tenía enemigos, ayudaba a muchos en lo que fuera. Y a todos los hombres les gustaba porque la veían muy bonita, muy chiquita y exquisita”, dice Hunt.