El ex director del Servicio de Seguridad General e Inteligencia de Israel (Shin Bet), Jacob Perry, defendió hoy la construcción de muros entre México y Estados Unidos y entre Israel y Palestina porque, a su juicio, "debe haber barreras para hacer cada vez más difícil la trayectoria del terrorismo".
En una conferencia de prensa convocada en la capital mexicana por el Instituto Ciudadano Estudios Sobre la Inseguridad (ICESI), Perry apuntó, sin embargo, que "no se debe equiparar a un migrante con un terrorista", aunque es "innegable" que el muro en la frontera entre México y EU. "también pretende frenar la inmigración ilegal", agregó.
El experto calificó de problema "enorme y difícil" la cuestión de la inseguridad y el narcotráfico en México, porque el país representa una zona de tránsito de drogas hacia EU.
Para Perry, el muro en la frontera mexicano-estadounidense se diferencia del que hubo entre Alemania occidental y oriental en que el primero no tiene "una motivación política", sino que fue construido "para establecer un obstáculo real a los que destruyen la vida cotidiana a ambos lados de la frontera".
"La labor de los dos gobiernos debe ser explicarle a la ciudadanía que estos obstáculos físicos van a hacer sus vidas mejores", agregó.
Perry lamentó que haya grupos políticos cuyo "único objetivo" sea oponerse a Estados Unidos, en alusión a sectores que creen que el muro tiene una motivación política.
En su opinión, la meta es "facilitar la vida de las personas a ambos lados del muro", para lo cual, explicó, "hay que realizar negociaciones y establecer consensos para encontrar un equilibrio entre los dos territorios".
No obstante, indicó que el muro "no hace todo el trabajo en la lucha contra el terrorismo, el narcotráfico y el crimen organizado", pues "también hace falta buena inteligencia, control de las drogas y sistemas de vigilancia aérea y terrestre".
Agregó que, a su juicio, el combate al tráfico de estupefacientes "no es menos difícil" que la lucha contra los grupos terroristas.
"Son muy crueles, tienen sus propios valores y en algunos países han logrado infiltrar varios niveles del gobierno", anotó sobre los carteles de las drogas.
Con el presidente Felipe Calderón a la cabeza, las autoridades y la sociedad de México han condenado de forma rotunda la creación de un muro en el límite fronterizo con Estados Unidos.
En EU. viven unos once millones de personas nacidas en México, de las cuales seis millones son indocumentadas, y cada año intentan cruzar la frontera hacia ese país cerca de medio millón de personas con el sueño de iniciar una nueva vida.
El 98 por ciento de los mexicanos en el exterior vive en Estados Unidos y dos terceras partes de ellos residen en los estados de California y en Texas.
Perry, que se mostró favorable a la Iniciativa Mérida, un plan de cooperación mexicano-estadounidense para combatir el narcotráfico, se mostró, asimismo, pesimista sobre el posible fin del conflicto en Oriente Medio.
"Así haya paz y un acuerdo entre Israel y Palestina, tendremos que continuar luchando contra radicales musulmanes que no estarán de acuerdo con los acuerdos a los que lleguemos. Sin embargo esperamos que esa lucha sea de menor intensidad", dijo.