Las familias que viven en el asentamiento humano conocido como El Chicharrón, esperan apoyo de las autoridades con hules y cobijas.
Más de 50 familias viven en extrema pobreza; sus jacales están asentados de manera irregular
EL SIGLO DE TORREÓN
MATAMOROS, COAH.- Más de 50 familias viven en condiciones de extrema pobreza en jacales que fueron asentados de manera irregular, a un lado del tajo conocido como El Chicharrón. Aquí la gente pide la atención de las autoridades municipales, quienes no han acudido en su auxilio; aquí se necesita mucho apoyo. No hay luz, ni agua y requieren hules y cobijas para pasar la temporada invernal.
Sanjuana Rivera y Bruno Guerrero, es un humilde matrimonio que llegó hace un año al lugar con la esperanza de tener una casa. Han pasado de todo: sustos, hambre, sed y ahora, mucho frío, pues el viento helado “chiflonea por todos lados”.
Como es un asentamiento irregular establecido a unos kilómetros de la colonia Ampliación Carolinas, donde hasta el momento nadie los ha retirado del lugar. “Dicen que eran terrenos ejidales y ahora son de Presidencia, la verdad no sabemos, pero estamos con la esperanza de obtenerlos y fincar nuestro hogar”.
Para abastecerse de agua, tienen que caminar varios kilómetros a lo que son los recién inaugurados campos de futbol, donde un sistema de agua tratada humedece el pasto. “No es agua para beber, nada más la usamos para lavar la ropa y a veces, para bañarnos...”, comentó Sanjuana Rivera.
Otra vecina del lugar es Jovita Perarla, quien desde hace 33 años es viuda. Ella vive con un hijo que es soltero y que trabaja en la pizca de espiga, donde gana muy poco. “Apenas para comer... pero ni modo, qué más podemos hacer”.
La gente almacena agua en tanques que mantiene tapados para evitar que se ensucie. Ellos afirmaron que los de la Secretaría de Salud no han acudido al lugar para fumigar o aplicar abate.
“Aquí nadie ha venido, las autoridades de ningún lado, nosotros somos quienes vamos para solicitar ayuda pero nada recibimos”, aseguró Jovita quien dijo que hace poco acudió a Presidencia para pedir cobijas pero la mandaron con las manos vacías.
El frío agudiza más las carencias que enfrentan las personas que habitan en colonias precaristas de Matamoros, pues viven en humildes jacales de madera y cartón, materiales que no los protegen de las inclemencias del tiempo.
“Nosotros necesitamos empalmarnos, tapar agujeros... por eso necesitamos cobijas de hule pero no hemos tenido ayuda de Raúl Onofre Contreras.
Aunque son personas que padecen muchas calamidades a diario, como la presencia de víboras, tarántulas y todo tipo de fauna nociva que por la falta de luz no las ven en las noches, “estamos siempre con el Jesús en la boca”.
Ellos se alumbran un rato con un mechero que mantienen prendido, sin embargo, aun así, dicen que tienen la esperanza de sus gobernantes, “es que estamos seguros de que tarde o temprano, nos darán la mano...”, comentaron los vecinos de la colonia El Chicharrón.
AUMENTAN CONSULTAS
Un incremento ligero en las consultas se registró en los últimos días en el Hospital General de Matamoros, informó el titular de dicho nosocomio, Gerardo Manuel Michel Hernández, quien pidió a la población que tome en cuenta las recomendaciones de las autoridades de salud para proteger a los niños y adultos mayores de 60 años.
Dijo que la mayoría de los pacientes acuden por males respiratorios, provocados principalmente por las bajas temperaturas que prevalecen en la región.
El frío ha empezado a manifestarse en los últimos días y la gente debe extremar los cuidados, sobre todo en los menores de edad que deben de acudir bien abrigados a las escuelas y las personas mayores, taparse bien antes de salir de casa.
Actualmente, en promedio, se está atendiendo a un total de 20 personas diariamente que presentan cuadros de Infecciones Respiratorias Agudas.
Por parte de la institución, se está implementando un programa de contingencia que consiste en la organización para difundir algunas estrategias educativas y de prevención.
Con este tipo de acciones, se busca evitar situaciones como los cambios bruscos de temperatura y que se utilice el carbón para calentar algunas áreas del hogar o que tengan una prevención en cuanto al manejo de productos o medicamentos que pudieran generar alteraciones más graves antes de acudir con el médico.
Para evitar este tipo de situaciones, se cuenta con un cuadro básico de medicamentos, que son los fundamentales para atender las infecciones respiratorias, los cuadros gripales y los cuadros diarreicos en esta temporada por el caso del rotavirus, con el ánimo de evitar algún deceso debido a estas entidades patológicas.
Por las medidas de prevención, existe una disminución en el cuadro neumónico y por eso, la mortalidad por neumonía tiene un descenso significativo.
Están preparados
En caso de que se presente una contingencia por la temporada invernal, existen las condiciones para apoyar a quienes necesiten protección. Los planteles educativos, instalaciones de Bomberos y Dirección de Seguridad Pública Municipal, están preparados para dar amparo a la gente.
El titular de Protección Civil de Matamoros, Francisco de León Aguilera, informó que aunque en Matamoros por tradición, la gente cuando necesita ayuda la pide a sus propios familiares o amigos, aseguró que existen los medios para auxiliar a quien lo requiera.
“Aquí en Matamoros la ciudadanía no está acostumbrada a ir a los albergues o refugios, pues cuando se ven en situaciones de peligro o de cuidado, acude primero con sus parientes en lugar de a algún otro lado”, manifestó.
En el caso del edificio de Bomberos, dijo que hay espacio para guarecer hasta cuatro personas y que en la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM), a otra cantidad igual de individuos.
Sin embargo, manifestó que si se presentara una situación de seria importancia, están listas las instalaciones del CBTIS número 196 y otros planteles educativos.
“Pero aquí en Matamoros, no se ha presentado alguna contingencia y por eso, los rondines por las calles se están llevando a cabo de manera constante por la noche para prestar el apoyo sobre todo a los indigentes o un grupo de borrachitos que aquí en Matamoros, se conoce como el “Escuadrón de la Muerte”.
A ellos los recogen las patrullas y se los llevan a la DSPM o en su caso a Bomberos para darles abrigo, sobre todo, en los días cuando se registra un mayor frío, manifestó De León Aguilera, quien agregó que ahí se les brinda comida, café caliente y cuando es necesario, atención médica.
Aseguró que este operativo ya está vigente, por lo que se continuará desarrollando la labor de detección y vigilancia tanto en los paseos públicos como en colonias proletarias, sobre todo aquéllas donde hay casas de cartón, con el objeto de brindar el apoyo a los ciudadanos que lo necesiten.
En este caso, sectores como la Ampliación Carolinas, Enrique Martínez y Martínez, 21 de Marzo y el asentamiento humano, reconocido como El Chicharrón.
