Esperan respuestas concretas los empleados de la maquiladora textil de Nombre de Dios que desde hace seis meses tiene problemas de producción.
GUADALUPE VICTORIA, DGO.- El cierre de Tex-Pant es temporal, aseguró Mario Quiroz Ontiveros a este matutino, señalando la crisis por la que atraviesa la industria textil, aunque fuentes allegadas a la empresa señalan que cambiarán de lugar.
El Alcalde comentó que vía telefónica se comunicó con Marcela Sánchez Yaca, dueña de la maquiladora, quien le comentó que el cierre será temporal, por cuatro o cinco semanas, ya que actualmente no hay clientes.
Por tal motivo, Sánchez Yaca anunció que en los próximos días realizará una gira de trabajo por la Ciudad de México y Aguascalientes en busca de interesados en trabajar con la empresa.
Será en los próximos días cuando se ponga en contacto nuevamente el Presidente Municipal con la dueña de la empresa para saber el estado en el que queda la maquiladora.
Quiroz Ontiveros comentó que giró instrucciones para mantener vigilancia permanente en las instalaciones de la maquiladora, ya que se manejaban los rumores de que la maquinaria la estaban sacando ex trabajadores que no han recibido su finiquito por temor de no recibir nada.
Por otra parte, señaló que en breve se comunicará con el Secretario de Economía para lograr traer más inversión al municipio y que en vez de despedir gente aumente la plantilla de trabajadores y de esta manera evitar más desempleo.
De manera extraoficial, fuentes allegadas a la empresa dicen que la maquinaria propiedad de Tex-Pant ya está lista para ser trasladada a otro lugar.
También se comentó que se espera para el próximo sábado la liquidación de todas las personas despedidas.
Empresas “golondrinas”
La industria textil inició en Guadalupe Victoria durante el primer trienio de Bernardo Ceniceros Núñez 1995-1998, con Lajat; luego vendrían otras como Libra en Calixto Contreras y Manufacturas Allende de Queretaro.
Durante la administración de Alfredo Ortiz Saucedo, 1998-2001, se instala Owen-By de México, con matriz supuestamente en Los Ángeles, California.
En términos generales han sido empresas “golondrinas” con sueldos bajos, pero que de alguna manera en las comunidades rurales resulta como un paliativo por no tener ninguna alternativa de empleo más que el campo.
De todas esas empresas solamente se mantiene la de Calixto Contreras con algunos 60 empleos; el resto ya cerraron, algunos con actitudes fraudulentas como Owen-By, que no respetó un convenio de diez años de labores, pues sólo se mantuvo tres en que no pagaría impuestos ni renta. Cuando tenía que cumplir con esas obligaciones, se fue.