Es la imagen de la plazuela antes de la intervención y las obras en este lugar. Sin embargo, la Canacope considera que al concluir el proyecto ya no debe existir comercio ambulante instalado sobre esta plaza.
Demanda Canacope evitar crecimiento de ambulantes en la Plazuela Baca Ortiz al terminar obras
El Siglo de Durango
La Cámara Nacional de Comercio en Pequeño (Canacope) demandó a la Presidencia Municipal que se imponga como autoridad y evite el crecimiento dentro y en los linderos de la Plazuela Baca Ortiz al terminar las obras de recuperación en la misma.
César Augusto Pineda Hernández, líder de la Canacope en Durango, consideró fundamental que la actual y la próxima administración municipal dejen en claro su papel de gobierno en el tema del ambulantaje y del comercio ambulante.
Y es que, en ese mismo sentido pidió que por fin se acaben los tiempos de la anarquía en la vía pública, donde cualquier persona puede salir a las calles a vender sus productos con o sin permiso de las autoridades.
De manera precisa señaló que se respaldan las labores que realice el Municipio para reubicar a los vendedores informales instalados en la Baca Ortiz, porque en ese sitio ya no deberá existir el problema de ambulantaje que ha padecido la plaza por años.
“Todos los comercios deben estar establecidos. Salir a la calle a vender ya no es posible. Las autoridades deben poner atención para que esta situación ya no suceda en el municipio de Durango, “opinó.
Pineda Hernández indicó que en otras naciones e incluso en otras partes de México se ha dado cauce al comercio informal al organizarlo y mantenerlo ligado a actividades culturales y artísticas para llevar actividades comerciales de mayor altura.
Puso de ejemplo que se han empezado a hacer los primeros esfuerzos para que los comerciantes establecidos del Centro Histórico de Durango entren a esta dinámica de dar un “plus” a su actividad comercial organizándose entre sí y ofreciendo otras ventajas y atractivos.
El líder de la Canacope señaló que en la calle de Patoni se hizo un primer esquema de este tipo, pues se cerró la calle por unas horas y se tuvieron actividades artísticas, lo que motivó que se movieran en esa zona más de cinco mil personas en un día.
“La postura de la Cámara es que el pequeño comercio se debe fortalecer y nos debemos desarrollar pero siempre con un sentido de corresponsabilidad con la ciudadanía. Por eso creemos que los ambulantes e informales deben entrar a una regulación también”, expuso.
César Augusto Pineda consideró que las autoridades no deben actuar contra el comercio ambulante solamente por la presión que ejercen organismos empresariales como Canaco o Canacope, sino que deben tomar cartas en este asunto para propiciar condiciones equitativas en el desarrollo del comercio en la ciudad.
“Es que, si las autoridades siguen sin hacer su chamba y negociando con los líderes de comerciantes ambulantes y todo eso, pues vamos a seguir teniendo las mismas condiciones, y lo que proponen los candidatos a alcaldes sobre la regulación del comercio, pues simplemente no se va a lograr nunca en esos términos”, finalizó.
Realidad
El crecimiento del comercio ambulante es el reflejo del desempleo que existe en Durango, por lo cual junto con su control se debe pensar en generar mayores oportunidades a los ciudadanos que carecen de trabajo formal, según lo manifestaron hace unas semanas diputados locales del Congreso del Estado.
Y es que, los legisladores de distintos partidos consideraron que aunque es un problema a nivel nacional, los tres niveles de Gobierno aún no han sido capaces de generar las plazas laborales suficientes para abatir así el ambulantaje, el cual surge por la necesidad de sobrevivir.
