TORREÓN, COAH.- Los dos integrantes de una banda de extorsionadores telefónicos que fueron consignados por secuestro agravado, se reservaron el derecho a declarar y será hasta el próximo miércoles 14 de noviembre, cuando se resolverá su situación legal. Los implicados pueden alcanzar mínimo una pena de prisión de 20 a 45 años.
En el Juzgado Tercero del ramo penal, a cargo de María Luisa Valencia García, rindieron su declaración preparatoria Mario Fortunato Parra Moreno de 21 años y José Mario Ibarra Pérez, de 22 años de edad, miembros de una banda que se ostentaban como integrantes del crimen organizado “Zetas” y lucraban con sus víctimas.
Los inculpados son estudiantes universitarios en una institución privada de la ciudad y también se conoció que hay más “estudiantes” implicados en el delito de secuestro agravado que ya son buscados por las autoridades de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Coahuila (PGJEC).
El delito que enfrentan los dos sujetos es de secuestro con circunstancias calificativas por haberse cometido en casa habitación por dos o más personas con violencia moral y mediante el uso de armas de fuego, además de robo en su modalidad especialmente agravada por cometerse con intimidación en las personas, por tres o más individuos.
El proceso penal es el 181/07, por hechos cometidos el pasado 8 de octubre de 2007, cuando robaron con lujo de violencia a una familia en su casa de la colonia Nueva California, para luego secuestrar al jefe de la familia y obligarlo a entregar todos los bienes de su negocio de telefonía celular.
El monto de lo robado en el negocio ascendió a más de 150 mil pesos y en la casa a poco más de 40 mil pesos incluyendo joyería diversa.
Los inculpados en el secuestro fueron detenidos el pasado 18 de octubre junto con Edrey Salas Muro, de 25 años; Irving Alberto Parra Morán, de 19 años; Aarón Ortiz de la Fuente, de 18 años y Javier García Favela, de 30 años, quienes permanecen bajo arraigo y enfrentan cargos por extorsión y otros delitos patrimoniales.
