La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, declaró el lunes que el fallo de extradición a Perú del ex presidente Alberto Fujimori emitido por un tribunal chileno es una ''decisión consecuente'' con la importancia que Chile asigna a los derechos humanos.
''Corresponderá a la justicia peruana definir las responsabilidades o no'', dijo en una rueda de prensa en el ámbito de la Asamblea General de las Naciones Unidas.
Fujimori, quien durante su decenio en el cargo hasta el año 2000 había sido un protagonista de este tipo de reuniones de la organización, fue extraditado el pasado fin de semana luego de 22 meses de permanencia vigilada en Chile.
Una sala penal de la Corte Suprema desestimó 6 de 13 acusaciones del alegato del gobierno peruano, pero admitió que había bases para que fuera juzgado en Perú por dos cargos sobre violaciones de derechos humanos y cinco por corrupción.
Bachelet hizo notar que en su país los poderes del estado ''son autónomos, por lo que nunca hablamos sobre los fallos'' de la rama judicial.
''Lo que sí dijimos es que la extradición del ex presidente Fujimori a Perú demostraba que la justicia, primero, había hecho su tarea como correspondía, trabajando bien, y que había tomado una decisión consecuente con un tema que para nuestro país es importante, que es el tema de los derechos humanos''.
Chile estuvo sometido a dictadura del general Augusto Pinochet durante 17 años. Una comisión investigadora documentó más tarde la muerte de 3 mil 197 personas por razones políticas, incluidos unos mil 200 detenidos desaparecidos.
Bachelet, quien hablará el martes ante la asamblea general, explicó que después que el tribunal dijera que había ''méritos suficientes'' para la extradición de Fujimori, su gobierno se limitó a ''acatar el fallo de la justicia y asegurar que se cumpliera de manera adecuada, a la mayor rapidez posible''.
Fujimori se encuentra ahora recluido en Lima en una cárcel transitoria de la policía. Las autoridades de su país aún no han señalado fecha para su procesamiento judicial.