General Motors comenzará a fabricar automóviles híbridos en su planta de Ramos Arizpe, lo que representa la introducción de esa tecnología en México.
La armadora estadounidense anunció una inversión de 585 millones de dólares en su planta del sureste coahuilense, en donde fabricará el modelo de SUV compacta “Captiva”, que combinan motor de gasolina con motor eléctrico y que llega a reducir en 20 por ciento el consumo de gasolina de un automóvil.
El anuncio de la empresa se hizo en Los Pinos en una ceremonia con el presidente Felipe Calderón, el gobernador de Coahuila, Humberto Moreira y el director de GM en México, Kevin Williams. La empresa planea una segunda inversión en el sureste coahuilense de más de mil millones de dólares.
Williams dijo que el modelo Captiva, que será fabricado en su totalidad en Coahuila, será para exportar a Estados Unidos, aunque se planea comercializarlo en México “para estudiar su viabilidad en el futuro”.
La introducción de la tecnología híbrida en México pondrá al complejo automotriz de Saltillo en una posición privilegiada, al ser la única planta en el país que produzca este tipo de vehículos que tienen gran demanda en Estados Unidos y Europa.
La introducción de la tecnología para autos híbridos podría impactar en la Región Lagunera gracias a la oferta e instituciones de educación superior, según Moreira. “El recurso humano de La Laguna puede ser un aporte importante”, dijo.
Sin embargo, aún no se han anunciado inversiones para La Laguna que sean comparables a las que atrajo Saltillo en el último año, con proyectos de Chrysler, Freightlines y GM por más de mil millones de dólares.
Los vehículos híbridos serán producidos por completo en la planta de Ramos Arizpe, lo cual confirma que la empresa automotriz ha tomado a Coahuila como un punto para sustituir la producción en Estados Unidos.
En la ceremonia, Calderón anunció que el Gobierno Federal buscará estimular el uso de vehículos ahorradores en combustible mediante incentivos fiscales como la exención del pago de tenencia.
