El presidente Felipe Calderón, antes de llegar a Ciudad del Carmen, visitó dos comunidades en Quinta Roo, que fueron afectadas por el huracán "Dean".
Primero visitó la comunidad de Chacchoben, en donde escuchó las quejas de los habitantes, quienes aún siguen sin energía eléctrica y el agua potable ha amenazado a escasear.
En su mayoría son pequeñas chozas habitadas pro indígenas mayas las que destruyó el viento, aunque también hay construcciones de concreto que se vencieron ante el paso del meteoro.
Cientos de árboles han sido removidos de los caminos rurales y de las carreteras por parte de los habitantes y con la ayuda de los elementos del Ejército que aplican el Plan DNI.
Más tarde viajó en helicóptero a la comunidad de Majahual, ubicada en la zona costera del estado.
El mandatario visitó la choza construida de palma y guano de donde fue rescatado un anciano que camina con dificultad.
Al salir del lugar donde estaba al casa, el Presidente resbaló de unos escalones de tierra donde estuvo a punto de caer.
Más del 50 por ciento de las viviendas sucumbieron ante las ráfagas de viento y decenas de comercios, restaurantes, discotecas y viviendas se vinieron abajo o perdieron sus techos de palma.
La gente ha solicitado la distribución pronta de láminas de cartón, madera, agua y alimentos que hasta el momento no han llegado.
En este lugar se ubica uno de los muelles, el segundo más grande del estado de donde atracan ferrys turísticos, principal fuente de ingreso de la zona.
El titular del Ejecutivo recibió la información de parte del gobernador de Campeche, Jorge Carlos Hurtado Valdez, quien le da los pormenores de los daños en la entidad.
Viajan con Calderón los secretarios de Defensa, Marina, Salud, Desarrollo Social y Comunicaciones, entre otros.