Toros, toros, toros…
El matador de toros Germán Vielma, deja momentáneamente los avíos y concluye el año como empresario con el apoyo de patrocinadores se ha anunciado el Serial de 8 novilladas. Iniciando el domingo 11 de noviembre a las 16:00 horas en la Plaza Salvador Barrera de Lerdo, Durango, contemplando también la posibilidad de concretar carteles en le Coso de la colonia Moderna.
El primer festejo de la serie marcará el debut como novillero de Álvaro Jara, joven lagunero con cualidades físicas, que tiene ya tiempo recorriendo la legua y que a sus veinte años la oportunidad le ha llegado.
Este puede ser el inicio de una exitosa carrera o el término de la misma, Álvaro así lo manifiesta. Consciente de que en el mundo del toro el peligro es latente, pero no se compara o se ignora, al saborear la satisfacción de obtener el triunfo.
En la anunciada tarde de debut, podremos admirar en el ruedo al novillero lagunero Aarón Hinojosa, alternando con Miguel Jeán –quien por cierto es el actual triunfador de la novillada de la Feria de Zacatecas- y Mario Toledo, jóvenes que con valor enfrentarán a los bravos novillos de la ganadería de Torrecillas, la cual se ha caracterizado por traer a la Comarca Lagunera excelentes ejemplares.
En busca de hacer brecha a los jóvenes, amantes de las más bella de las fiestas, el matador Germán Vielma se ha echado a cuestas esta empresa brindando la oportunidad a posibles nuevos valores, de cumplir el sueño de llegar a ser toreros. Enhorabuena por el afán de sembrar.
Esta es la oportunidad que Álvaro Jara estaba esperando, con su debut se cierra un ciclo más de jóvenes que deciden ir en pos del sueño de ser figuras del toreo.
Importante será que los que vienen detrás, cuenten además de la afición y valor, con una Academia que les enseñe el arte de torear y de no llegar a ser figuras, por lo menos se logre dejar en ellos la huella impresa del toreo, para que con valor y dignidad enfrenten al toro de la vida.
La Comarca espera que las autoridades y los toreros laguneros, brinden el espacio necesario y digno para la cristalización de ese sueño.