¡Por fin! terminamos de decorar la casa, y ya todo está en su lugar; sólo falta añadir ese complemento tan bello como efectivo para dar vida al hogar: las flores.
Los arreglos y centros de mesa son ideales para añadir un poco de alegría especialmente a las estancias principales. Su aroma, frescura, colorido y sus múltiples formas les hacen tener cabida en cualquier espacio.
Escoger las más adecuadas para cada rincón en ocasiones requiere de algunas consideraciones.
"La forma y el color son sus características fundamentales. Deberás combinar adecuadamente estos rasgos en las diferentes especies que escojas. Lo más frecuente es crear esquemas con base en tonos cálidos, como rojos, amarillos o naranjas; o fríos, como verdes y azules. El blanco será el comodín para dar armonía al conjunto", comenta el decorador Ernesto J. Plaza, de la firma Estilo y Hogar.
El experto dice que las flores y hojas de tallo ancho se mantendrán rectas con mayor facilidad, mientras que las delgadas podrán necesitar ayuda, como guías o alambres para mantenerse firmes. "Una mezcla siempre efectiva consiste en emplear distintas variedades de un mismo tipo de flor. De este modo conseguirás mantener la coherencia, gracias a que las especies compartirán un aspecto similar, pero mantendrás la diversidad con los distintos colores", explica Plaza.
Añade que los ramos pueden presentar composiciones muy distintas. "Pocas flores crearán un bouquet sencillo y sobrio que se adaptará bien a zonas reducidas.
En una habitación amplia deberán emplearse muchas más. Si la disposición del arreglo tiende a la horizontalidad, los espacios lucirán más ambientados", afirma el experto. Recipientes
La base es clave e influirá enormemente en el diseño del centro o arreglo en cuestión. El ancho de la boca y su altura serán fundamentales a la hora de cortar las plantas. "Si está fabricado en un material transparente, deberás tener mucho cuidado con el aspecto de los tallos ya que serán completamente visibles.
La base
"Los jarrones pueden ser ovalados, cuadrados, cónicos, asimétricos, etcétera; una forma muy de moda actualmente es la de cilindros altos; pueden ser de vidrio transparente o de color, pero ahora se usa más la primera opción", explica.
De manera automática, se tiende a situar el arreglo floral justo en el centro de la mesa.
"Si bien este lugar es muy adecuado para que luzcan las flores, no descartes inmediatamente otras alternativas, como ponerlo sobre el trinchador del comedor o en un rincón, sobre todo si queremos dirigir las miradas hacia un área determinada".
En los recipientes transparentes podemos emplear piedra bola de río u otro material para rellenar el fondo. Este recurso decorativo personalizará tu centro a la vez que romperá con la monotonía que podría provocar la visión de los tallos desnudos. Asegúrate de que los elementos que introduzcas estén limpios para no ensuciar el agua del recipiente.
Larga vida
Hay varios métodos que te ayudarán a alargar la vida de las flores en un jarrón. Disolver una aspirina en el líquido mantiene su aspecto límpido, incluso considerando los elementos desprendidos por la propia planta.
Evita la exposición directa a la luz solar: es un valioso consejo que te permitirá lucir en todo su esplendor tu nuevo arreglo. Recuerda que el tallo de algunas plantas sigue creciendo pese a haber sido cortado, de forma que debes vigilarlo, volviendo a seccionarlo si es preciso, así mantendrás por más tiempo la belleza de tus flores.
