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SUGIEREN DESAZOLVAR ARROYO

Leí que el municipio tiene en resguardo personal listo para ayudar a la gente ante posibles inundaciones. ¿Qué no es mejor prevenir que lamentar?

En la colonia Morelos y La Fe, por la Centenario, entre calle 10 y 11 en Torreón, existe un arroyo con demasiado azolve, provocando que en temporadas de lluvias desborde y se introduzca agua a las casas. ¿Qué no es mejor, que en lugar de tener personal en resguardo sea enviado a desazolvar el arroyo? Así, se evitarían inundaciones, de otra forma pensaríamos que con el pretexto de las lluvias se formó una plantilla de -aviadores o fantasma para exprimir las arcas municipales.

Ya hace unas semanas, el municipio envió a una cuadrilla, que pasaban más tiempo platicando o tirados en el suelo que trabajando, la prueba está a la vista, pues del azolve, sólo retiraron aproximadamente 15 por ciento. O al menos que ésa haya sido la meta, pues veo que este presidente se está caracterizando por hacer las cosas a medias o menos de la mitad, como en este caso.

Eduardo González Caldera,

Torreón, Coahuila.

PROPONEN DRENAJE PLUVIAL

El concepto tradicional que siempre hemos tenido para evacuar el agua de lluvia es el de colocar tubos paralelos a los tubos sanitarios y capturar el agua en ellos, lo cual resulta muy caro, por lo tanto, poco probable que algún día se nos haga el milagro. Y es caro porque además de bombardear las calles y convertirlas en zona de guerra hay que colocar grandes colectores debido a dos cosas:

1.- La precipitación pluvial de La Laguna al año es de 280 milímetros, es decir 280 litros por metro cuadrado, pero se le ocurre a la naturaleza dejarla caer en periodos de 15 minutos en máximo seis ocasiones por año lo que nos da más de dos cubetas de agua de 20 litros, por cada metro cuadrado, cada ocasión que llueve.

2.- La pendiente del terreno natural de Torreón es hacia el oriente, “porque hacia allá corría el río” y es máximo del 0.3 por ciento.

Esta situación nos da un problemón, mucho volumen y a muy poca velocidad, lo cual dispara el tamaño del colector. Una solución bastante más económica sería colocar pozos de absorción en los lugares problemáticos. Esto es un tubo vertical ranurado que mande las aguas a profundidades permeables y la incorpore al manto freático que bastante falta le hace, considerando coladeras y protecciones necesarias, lo cual sería un alivio para todos. O bien construir parques hundidos uno o dos metros abajo del nivel de banquetas y producir hermosas áreas verdes que se regaran con el agua que nos cae del cielo.

A lo mejor es un sueño todavía más improbable.

Arturo P. Salas Juárez,

Torreón, Coahuila.

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