VOLUNTAD POLÍTICA
Nadie debe sorprenderse con la actitud que están asumiendo nuestros gobernantes. Las promesas de campaña se van diluyendo conforme avanza el tiempo y el verbo se transforma y se utiliza sólo para defender intereses particulares que ellos conquistan a través del poder que le hurtan al ejercicio político, propio del político en subdesarrollo.
El profesor Moreira no debe confundirse, alguno de sus colaboradores debería decirle que está gobernando a los coahuilenses en general y a los laguneros en particular; que nuestras aspiraciones son diferentes a las de los venezolanos y que son diametralmente opuestas a las aspiraciones de los cubanos.
Ellos, que prometieron defender y velar por nuestros intereses, son en realidad unos farsantes, son simples personajes ávidos de poder, que se adueñaron de los recursos de un pueblo.
Ellos, que con sus actos manchan los apellidos Moreira, Martínez, Viesca, Pérez, Olmos y muchos otros. Ellos, que no saben respetar los derechos que nos da nuestra Constitución Mexicana, porque se orientan primero por lo que ordenan los dictadores del partido político al que pertenecen y que entre sí se protegen y se cuidan unos con otros sus espaldas, sin importar que algunos de ellos estén señalados por sus prácticas deshonestas.
Decir que la Suprema Corte ordenó la suspensión de todas las obras del Gobierno Estatal, es sólo una farsa más de un enredo legal que unos reclaman porque le falta voluntad política (falta voluntad política donde hay puros políticos chafas).
A todos nos consta que antes de esta orden legal, las obras ya estaban muertas. Ellos mataron nuestro Nudo Mixteco y en su lugar dejaron una enorme herida que lacera a todos nuestro orgullo lagunero, una herida que nos duele y que nos ofende.
Al igual, el Distribuidor Vial Revolución recibió un tiro de gracia y todos sabemos quiénes son los verdaderos asesinos; como también sabemos, que son impunes porque gozan de la protección de los mismos delincuentes.
“No se confunda, caballero Moreira… con nosotros no se meta porque saldrá espinado”; así deberían manifestarse todas las organizaciones empresariales en defensa de esta hermosa Región Lagunera.
Juan Antonio Aguilar Tello,
Torreón, Coahuila.