Lejos de pensar en una expansión, la Liga Nacional de Baloncesto Profesional (LNBP) deberá considerar una reducción a 20 equipos, con el fin de asegurar la solidez de todos los participantes y ofrecer un espectáculo de mayor calidad en todas las plazas.
De cara a la actual temporada, muy pronto empezaron los problemas para la LNBP, primero fue el equipo Indebasquet del DF, que había confirmado su participación pero por falta de apoyo declinó. Después fue la Ola Roja, pionera que había participado en todas las temporadas, pero a escasos días de iniciar la actual campaña informaron sobre su retiro por un año.
Para tomar el lugar del cuadro capitalino, la liga hizo un esfuerzo por armar al representativo de Morelia, pero ya iniciado el actual torneo dicha organización aventó el arpa. No se pensaba participar y la premura del tiempo impidió que las cosas se hicieran bien. Hoy la LNBP trata a toda costa de mantener al equipo michoacano en competencia, pero la situación de los purépechas es cada día más difícil.
Pocos días después fueron los Correcaminos de Matamoros y Reynosa los que anunciaron su cambio de plaza, por no recibir el apoyo necesario para seguir. Nuevo Laredo y Piedras Negras se estrenan así como franquicias de la liga, en ambos casos existe gran optimismo, pero habrá que ver lo que se piensa en un corto plazo.
Tener 20 equipos vendría muy bien a la LNBP porque la participación se reduciría a plazas con el apoyo necesario para mantenerse a lo largo de toda la temporada.
Por otra parte, habría más jugadores de calidad disponibles tanto mexicanos como extranjeros y mexicoamericanos, la calidad del basquetbol necesariamente subiría en beneficio de los aficionados de todas las plazas.
Muy favorable sería también que el calendario regular se realizara con enfrentamientos del Norte contra el Norte y el Sur contra el Sur. En Torreón, por ejemplo, resulta más atractivo ver a Algodoneros contra Saltillo, Monterrey, Durango, San Luis o cualquier rival de la Zona Norte, que ver aquí a los Mayas de Yucatán, a los Bucaneros de Campeche o a los mismos Halcones de la Universidad Veracruzana.
Esta medida traerá, además, un notable ahorro de recursos para todos los equipos, porque imagine usted lo que cuesta a un equipo como Algodoneros viajar a Campeche, Mérida o Cancún, el mismo gasto deben hacerlo aquellas escuadras para venir a las plazas de la Zona Norte.
Los llamados clásicos tienen un ingrediente especial que suele ser una motivación extra para el aficionado. El pique que existe entre Torreón y Monterrey, Saltillo y Durango, provoca mayores expectativas que enfrentar a los equipos de la Zona Sur. En lugar de viajar a plazas muy lejanas sería muy positivo hacer dos visitas a los equipos norteños, a los que por consecuencia se recibiría un par de ocasiones en Torreón. Se obtendría un campeón de cada zona para enfrentarlos en la serie por el título absoluto.
La LNBP debe tener presente que así como hay equipos poderosos económicamente, con apoyos de grandes empresas o de instituciones educativas, existen otros que batallan para reunir los recursos para su operación, por lo tanto, es importante proteger a los asociados más débiles, que también son necesarios para el éxito de una temporada.
La seriedad e imagen de la liga es otro aspecto que no debe descuidarse, existe un reglamento oficial de la LNBP en donde claramente se dice que todo equipo debe presentarse a sus partidos con un mínimo de nueve jugadores, el que no cumpla perderá el juego en la mesa.
Hace unos días un equipo local se presentó con siete jugadores y ganó el partido, el visitante protestó la falta del dueño de la casa y se asegura que el presidente de la quinteta que jugaba en su gimnasio ofreció dinero al coach que redactaba la protesta, el estratega argentino no aceptó el ofrecimiento y ésta se hizo oficial.
Con el paso de los días, ¡vaya sorpresa!, en dicho juego prevaleció el triunfo local. Lo más grave es que en la hoja se anotaron foules a jugadores del cuadro local que no estuvieron en el partido, dicha medida se dio para comprobar que sí se había cumplido con el mínimo de jugadores que pide el reglamento.
Si tratar de sobornar es una falta grave, también lo es asentar datos falsos en la hoja de anotaciones. Aquí la pregunta es qué hicieron los árbitros al respecto y si en la mesa de anotaciones estaba gente que se prestó para el sucio movimiento.
La Liga Nacional de Baloncesto Profesional ha crecido, sin duda es el circuito más importante del país, sus jugadores surten a la Selección Nacional, pero no puede ser que haya arbitrariedades como la que se menciona o como las mismas que se dieron en la temporada anterior y en las cuales el afectado debió aguantarse, mientras que quienes violaron el reglamento se burlaron de éste.
La temporada marcha por buen camino, pero es importante borrar de una vez por todas los problemas existentes justamente cuando el fin de semana se cumplieron las primeras diez jornadas. El esfuerzo que se hace en las 24 plazas es muy grande, así se tenga todo el apoyo o se trabaje con carencias por falta de la ayuda, hoy en día tan necesaria.