Fotografía distribuida hoy lunes 3 de septiembre de 2007 que muestra a tropas británicas volviendo a su base de operaciones de emergencia tras la ceremonia en la que el control del complejo de Basora fue entregado al Ejército iraquí. (EFE)
Soldados iraquíes izaron el lunes la bandera de su país en el complejo del Palacio de Basora, luego que las fuerzas británicas se retiraron de su último cuartel en la ciudad.
La retirada dejará el control a una fuerza iraquí llena de milicianos chiitas.
Un comunicado británico informó que la operación comenzó a las 22.00 del domingo, y que "todas las fuerzas británicas llegaron al aeropuerto para el mediodía del lunes".
"No hubo enfrentamientos ni ataques contra las fuerzas británicas durante la operación. La entrega formal de los palacios se realizará en el futuro cercano", dijo el portavoz británico, mayor Matthew Bird.
La salida de la mayoría de los 500 efectivos británicos del palacio dejó a la segunda ciudad más grande del país sin presencia alguna de la fuerza multinacional, por vez primera desde el 2003, cuando comenzó la invasión encabezada por Estados Unidos.
"Informamos a (esas milicias) que combatían contra las fuerzas británicas que los efectivos iraquíes están ahora en los palacios", dijo el teniente general Mohan al-Fireji, comandante iraquí en la zona. Añadió que el último efectivo británico partió aproximadamente a las 4.30.
Varios vehículos británicos salieron por las puertas del complejo el domingo por la noche, con destino al aeropuerto internacional de Basora, ubicado a unos 20 kilómetros. Es la última base restante de Gran Bretaña en el sur de Irak.
Funcionarios estadounidenses han expresado preocupación por la posibilidad de que las fuerzas británicas abandonen la ciudad, donde ha habido enfrentamientos entre milicias armadas, algunas supuestamente vinculadas con Irán.
La ciudad controla una línea crucial de suministro por tierra desde Kuwait y Bagdad, y se encuentra también cerca de importantes yacimientos de petróleo.
En Londres, el primer ministro Gordon Brown negó que el retiro signifique una "derrota" de Gran Bretaña, y dijo que el traslado al aeropuerto fue planificado y organizado.
"Que quede muy claro esto. Se trata de algo previsto, éste es un traslado organizado desde el Palacio de Basora hasta la Estación Aérea", dijo Gordon a la cadena BBC.
El palacio de Basora había sido blanco de ataques de morteros y cohetes, casi diarios, por parte de milicias chiitas, hasta que las fuerzas británicas liberaron a unos 30 milicianos, hace unos meses. En aquella ocasión, Gran Bretaña informó que sus fuerzas abandonarían pronto el complejo.