Ganan terreno autos japoneses
Los automóviles estadounidenses van en descenso en los últimos cinco años.
La Secretaría de Economía autorizó una mayor entrada de autos de fabricación japonesa al país, ante la creciente demanda de los vehículos nipones en el mercado mexicano.
Sin embargo, el volumen de importación libre de pago de impuestos será mínimo porque se calcula con base en el desempeño que el mercado local registró el año pasado, el cual aumentó sólo 0.7 por ciento respecto de 2005, con ventas por un millón 139 mil 718 unidades.
Según el Acuerdo de Asociación Económica (AAE) que México y Japón firmaron en 2004, y que entró en vigor en abril de 2005, sólo se permite la entrada de autos por el equivalente a cinco por ciento del tamaño del mercado.
Entre abril de 2006 y marzo de este año ingresaron al país 56 mil 588 unidades fabricadas en Japón, que con la ampliación anunciada subirá a 56 mil 844 vehículos.
Masayuki Kawashima, director general de Jetro, la organización de comercio externo de Japón en Mexico, explicó que la medida estará vigente hasta marzo de 2008, la cual se volverá a revisar en esta fecha para determinar el aumento en las importaciones niponas.
El convenio comercial entre ambos países establece que en 2011 se permitirá la entrada de todos los vehículos manufacturados en Japón sin necesidad de un cupo específico.
El diseño, servicio al cliente y calidad del auto, son los principales elementos que impulsan la demanda de los autos japoneses en México.
De acuerdo con información de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) entre 2004 y 2006 la participación de las marcas niponas en el mercado doméstico aumentó cinco puntos porcentuales, es decir pasó de 27 por ciento a 32 por ciento, en detrimento de marcas como General Motors y Volkswagen. Las autoridades determinaron que el cupo de importación se repartirá en mayor medida entre las marcas con más antigüedad en México, como Nissan, Toyota, Honda y Mitsubishi, y el resto para las compañías de reciente ingreso al mercado local tales como Subaru, Suzuki y Jino.
“Los cambios de los porcentajes de asignación del cupo solicitados por el Gobierno japonés tienen como objetivo balancear las condiciones de acceso al contingente arancelario entre los productores y distribuidores de vehículos”, opinó IQOM. Según la consultoría comercial, entre 2006 y 2007 Nissan acaparó 41 por ciento de los cupos, Honda 15 por ciento, Toyota 11 por ciento y Mazda diez por ciento.
César Flores, director general de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) explicó que “80 por ciento del cupo es para los que ya tienen más tiempo en el mercado mexicano”. Declinó señalar cuál es el criterio para definir “la antigüedad” de una marca, pero reconoció que se buscó mantener la participación de los jugadores que ya estaban en México y dar una liberación gradual a los nuevos competidores. Del cupo vigente actual, tan sólo Nissan en 2006 utilizó 23 mil unidades para importar libre de arancel los modelos Urvan, 350Z, Infinity Q45, X-Trail y Murano, informó Diego Arrazola, director de relaciones públicas de la marca del sol naciente.
Flores agregó que el porcentaje de cinco por ciento del tamaño de mercado se definió desde las negociaciones para el establecimiento del AAE México-Japón en 2004.
De entonces a la fecha, el comercio entre ambas naciones creció más de 30 por ciento durante el segundo año de vigencia del AAE entre ambos países, según datos divulgados por la Embajada mexicana en Tokio, así como las inversiones japonesas en México.
Los datos de la sede diplomática revelan que desde septiembre de 2004 hasta marzo de este año, las inversiones anunciadas por empresas niponas ascienden a dos mil 851 millones de dólares. De esta cantidad la mitad la realizó Nissan y Mitsubishi.
Piden el ‘hoy No Circula’ para todo el país
La Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) pidió extender la aplicación del Programa “Hoy no Circula” a todo el país para evitar que los vehículos contaminantes emigren de la Zona Metropolitana a otras ciudades.
En entrevista, el presidente de la AMIA, César Flores Esquivel, explicó que los vehículos de más de diez años son los que más contaminan y tienen mayores dificultades para aprobar las verificaciones semestrales.
Aunque dijo que es posible dar mantenimiento a un automóvil de 15 años de antigüedad, "lo que no es fácil es incorporarle la nueva tecnología".
Expuso que además de un plan nacional de verificación vehicular, se requiere un programa integral que garantice un transporte público eficiente.
Los automóviles nuevos no contaminan, "el punto importante es qué vamos hacer con los vehículos usados en circulación que son los que emiten más partículas y gases a la atmósfera; eso implica no sólo el vehículo, sino un transporte público eficiente, un orden y cultura del tráfico", indicó.
Flores Esquivel señaló que el programa de verificación vehicular sigue vigente, pero "el que ahora se obtienen no solamente dos ceros, sino hasta cuatro y seis ceros ha distorsionado al programa; hay que revisarlo para enfocarlo hacia los nuevos caminos que debemos tomar tanto en el cambio climático, así como en términos de orden en el tráfico y de un mejor y más eficiente transporte público".
Cuestionó el hecho de que las autoridades ambientales utilicen el programa no para verificar las emisiones, sino para sacar de la circulación o darle menos incentivos a ciertos vehículos con un criterio ya no enfocado al ambiente, sino a condiciones de consumo de energía y de circulación.
Consideró inaceptable que las autoridades la Comisión Ambiental Metropolitana tome acciones arbitrarias, "puesto que se tienen que planear todas las acciones. La industria automotriz es una industria de planeación, no se puede improvisar".
La intención, explicó, es lograr los resultados que se tuvieron al principio del Programa Hoy no Circula, que fueron reducir cuando menos 25 por ciento las emisiones de gases con el sólo hecho de la cultura del mantenimiento y la afinación de los vehículos.
