Durante 16 horas ininterrumpidas, personajes de la política y la cultura prestaron su voz al creador de Cien Años de Soledad.
EL UNIVERSAL
MADRID, ESPAÑA.- Para festejar a Gabo y su trabajo literario la vicepresidenta primera del gobierno español, María Teresa Fernández de la Vega, abrió ayer la lectura de la novela Cien Años de Soledad con la que la Casa de América de Madrid rinde homenaje al escritor colombiano Gabriel García Márquez, que hoy cumple 80 años.
A lo largo de todo el día y durante 16 horas ininterrumpidas, representantes de la política y del mundo de la cultura prestaron su voz al creador de Macondo, que celebra también este año el cuarenta aniversario de la publicación de su obra más famosa y el 25 del Premio Nobel de Literatura.
La lectura pública comenzó a las 09:00 de la mañana (08:00 horas GMT), en la escalinata del Palacio de Linares, sede de la Casa de América, junto a la Plaza de la Cibeles, en pleno centro de Madrid.
Después de Fernández de la Vega, continuaron recreando distintos pasajes de la novela más representativa del realismo mágico la vicepresidenta del Congreso de los Diputados (Cámara baja del Parlamento), Carme Chacón, la secretaria de Estado para la Cooperación Internacional, Leire Pajín, y la secretaria de Estado para Iberoamérica, Trinidad Jiménez.
Cada uno de los lectores dispuso de 15 minutos, equivalente a siete páginas de la novela, para poder completar las 16 horas que los organizadores calcularon que llevaría la lectura completa de Cien Años de Soledad.
También mostraron su admiración por Gabo representantes del mundo del arte, del cine, de la literatura y de la prensa, como Marisa Paredes, Mariano Barroso, Sergio Cabrera, Mercedes Sampietro, Ángeles González Sinde, Emma Suárez, Jorge Franco, Jorge Eduardo Benavides, Fernando Ampuero, Montxo Armendáriz, Iñaki Gabilondo y Lola Álvarez.
Gabriel García Márquez escribió en México Cien Años de Soledad, que fue editada el cinco de junio de 1967, por la Editorial Sudamericana.
Su obra maestra fue decisiva para que la Academia Sueca le otorgara en 1982 el Premio Nobel de Literatura, y está considerada una de las mejores novelas de todos los tiempos.
Hoy, el de Aracataca llega a los 80 años de edad -los cuales festeja en Cuba un país que le es entrañable- y su novela cumple orgullosamente en el mes de junio cuatro décadas de haber sido publicada.
Hay fiesta en Macondo y en Cartagena, en cuyo Festival Internacional de Cine y Televisión se reunieron cinco directores que han llevado a la pantalla guiones o adaptaciones de obras literarias de García Márquez.
En la cita de Cartagena estará el brasileño Ruy Guerra, quien estrenará su cinta Veneno de Madrugada, basada en La Mala Hora. También asistirá el chileno Miguel Littín y el mexicano Jaime Humberto Hermosillo.
Participarán también en el festejo los colombianos Jorge Alí Triana y Lisandro Duque, quienes ofrecen aquí un par de testimonios a propósito de esa extraña complicidad cinematográfica que los une con el hombre que, a pesar de todo, prefiere ?inventar el mundo frente a la máquina de escribir?.
Más años, más libros
Este año, García Márquez ha comenzado a escribir el segundo tomo de sus memorias que presentará como ?fogonazos? de su vida, declaró Plinio Apuleyo Mendoza, uno de sus mejores amigos.
Gabo, como llama siempre Mendoza al Nobel de literatura, llamó al también escritor colombiano recientemente y le contó que había retomado el trabajo literario de sus memorias.
Antes me había dicho -agregó- que no habría un segundo tomo, pero evidentemente ha cambiado de opinión, para presentar esta obra como ?fogonazos? de su vida.
?Estuve primero muy preocupado cuando -García Márquez- pasó 2006 como año sabático. Me había dicho que deseaba dedicarse a leer, pero no podía imaginarlo sin escribir, ahora me siento más tranquilo?, dijo Mendoza.
Amigo del Nobel desde que le conoció en 1948, en un café de Bogotá, Mendoza que también compartió con él actividades periodísticas en París, Caracas y La Habana, declaró que hablan a menudo sobre la continuación de las memorias.
?Anda ya haciendo consultas conmigo y mis hermanas -dice- acerca de todo ese periodo posterior a 1955, de lo que serán sus memorias?.
Según lo que ha hablado con el escritor, la nueva obra ?no tiene que ser algo cronológico, pueden ser fogonazos de los recuerdos, porque no se trata de una biografía?.