Héctor Pablo Ramírez, vocero del gobierno de Oaxaca, descartó que se esté minimizando la gresca registrada la víspera entre appistas y policías municipales y estatales en la entidad.
El gobierno de Oaxaca está "más que puesto" no sólo para garantizar la fiesta de la Guelaguetza sino para hacer cumplir el Estado de Derecho, aseguró en entrevista televisiva.
El enfrentamiento se desencadenó cuando la vanguardia de integrantes de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), quienes se dirigían al cerro del Fortín para representar la "Guelaguetza popular", subía por la avenida Héroes de Chapultepec. Ahí comenzaron a caer desde la terraza del lugar y otros sitios aledaños petardos y granadas.
El funcionario estatal aseguró que el escenario que se vivió ayer dista mucho del conflicto del año pasado, reprodujo el noticiero televisivo.
En este sentido destacó que ahora "no hay barricadas, no hay suspensión de clases, no hay afectación al tránsito vehicular... no hay agresión a transeúntes y no hay conflicto magisterial que es lo más importante".
Asimismo, defendió el proceder policiaco al realizar las detenciones de papistas argumentando que el lugar donde se llevó a cabo la fiesta popular y el lugar donde se registró la gresca estaba a muchas cuadras de distancia, por lo que éstos no tenían nada que hacer provocando a cuerpos de seguridad, quienes, dijo, hacían su trabajo.
"Si hay agresión a estas personas se investigará... Hay que castigar a quien resulte responsable de estos hechos", señaló aunque en todo momento defendió la actuación de uniformados.