Aspecto de la zona arqueológica de Cacaxtla. (EFE)
La zona arqueológica de Cacaxtla, en el estado de Tlaxcala, se mantendrá cerrada durante seis u ocho meses para reparar los daños causados por una fuerte granizada.
Durante un recorrido con la prensa por la zona, el director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Alfonso de María y Campos, dijo que en Cacaxtla la precipitación de granizo ocurrida derrumbó los techos colocados para la protección de las edificaciones prehispánicas.
Según los especialistas, explicó, se colapsaron el 20 por ciento de los once mil metros cuadrados del techo que cubre la zona arqueológica, así como un muro y una columna de los vestigios tlaxcalteca.
"La columna está caída, pero está entera y se pondrá nuevamente en su lugar", mientras que "el muro se repondrá, pues se conoce la técnica y se tiene la información pormenorizada y fotografías" de su estado anterior, así como fragmentos del bloque, dijo De María y Campos.
Precisó que en los trabajos de restauración ya se han invertido unos 320 mil dólares donados por la aseguradora Zurich para desmantelar las estructuras derribadas y construir otras nuevas, y evitar así que los restos arqueológicos permanezcan a la intemperie.
Para avanzar en la reconstrucción, agregó, se requerirá una cifra similar que será aportada por Zurich.