Imagen computarizada que muestra el tamaño de la Tierra en proporción del nuevo planeta, el TrES-4.
Estiman científicos que su diámetro es 1.7 veces el de Júpiter, el más grande del Sistema Solar.
Científicos del Observatorio Lowell han descubierto el planeta más grande que se conoce, una bola de hidrógeno 20 veces más grande que la Tierra, en órbita alrededor de una estrella que se encuentra a 1,400 años luz.
Los científicos creen que su diámetro es 1.7 veces el de Júpiter, el más grande de nuestro sistema solar y su temperatura es de unos 1,260 grados.
“Probablemente no hay una superficie firme en todo el planeta. Uno se hundiría en él”, dijo el astrónomo Georgi Mandushev, investigador en el Lowell y autor principal del artículo que anuncia el hallazgo, publicado en la revista especializada Astrophysical Journal Letters.
Lowell, junto al observatorio de El Palomar en San Diego, California y telescopios en las Islas Canarias descubrieron el planeta en órbita alrededor de una estrella en la constelación Hércules.
Lowell anunció el hallazgo el lunes. Los científicos vieron por primera vez el planeta, llamado TrES-4 y otro más pequeño a mediados de 2006.
Los científicos creen que existe otro planeta en la misma constelación. “No estamos seguros de lo que hay allá”, dijo Mandushev. “Podría haber otro planeta en el mismo campo, lo cual sería increíble”.
El observatorio Lowell es conocido por el descubrimiento en 1930 de Plutón, que recientemente perdió su estatus de planeta.
Participa mexicano en misión de la NASA
El ingeniero mexicoamericano Jim Chase Castaños, es uno de los responsables de que el proyecto del Laboratorio de Propulsión de la NASA culmine con éxito su misión de búsqueda de vida microscópica en Marte.
La nave espacial Phoenix, que actualmente se encuentra rumbo al planeta Marte, es un proyecto de este laboratorio (JPL-NASA, en inglés), en el que Chase Castaños participa en la supervisión del artefacto que llegará dentro de nueve meses al ártico marciano.
“Para los científicos encontrar agua en otras partes del espacio es de gran importancia, porque si hay agua existe la posibilidad de que haya vida”, dijo Chase, de 32 años, ingeniero en sistemas de JPL-NASA.
La misión del laboratorio espacial Phoenix es analizar el suelo, el agua y el aire marciano en busca de vida microscópica.
La nave Phoenix, que despegó el pasado 4 de agosto de la base de la Fuerza Aérea en cabo Cañaveral Florida, está programada para aterrizar en el casquete polar norte del planeta rojo el 25 de mayo de 2008.