EL UNIVERSAL
TOLUCA, EDO. DE MÉXICO.- Especialistas del INAH que forman parte de un proyecto que conjuga arqueología subacuática y de alta montaña dio a conocer la víspera una serie de hallazgos prehispánicos hechos en la Laguna de la luna, ubicada en el Nevado de Toluca, en la primera expedición de este tipo que
se realiza en la zona.
Víctor Arribalzaga, jefe de campo del proyecto que involucra a especialistas en disciplinas como la biología y la geología, explicó que hasta el momento se presume que podría tratarse de un sitio al que llegaban peregrinaciones, donde había ofrendas y que, por los vestigios, eran dedicadas a Tláloc.
La Laguna de la Luna tiene una profundidad de ocho metros de altura y se localiza a cuatro mil 200 metros sobre el nivel del mar, y es la primera vez que es explorada por una expedición de estas características,
aunque desde los años 60 se sabe de saqueos en la zona, afirmó el especialista.
Sobre los hallazgos, informó que hay varios cetros rayo ceremoniales, asociados a Tláloc, aunque sólo han sido extraídos seis del lugar. “Estos cetros son de madera, de un tallado muy sencillo, sin colores o diseños y, según la investigación documental, eran utilizados para regular la lluvia”, comentó Arribalzaga.
Entre los cetros más importantes, precisó, se encuentra uno de 1.22 metros, que se encuentra fragmentado en más de siete piezas, sin embargo es uno de los pocos de los que se han podido encontrar todas las piezas, además de ser el más grande de los descubiertos. Algunos otros objetos encontrados en el lugar son puntas de maguey con la que se supone se llevaban a cabo autosacrificios.
También se han sacado a la superficie grandes cantidades de copal que se encuentra en forma cónica y esférica; así como pequeñas muestras de piedras como la obsidiana y la turquesa.
Destaca el descubrimiento de pequeños trozos de petate, relacionados con los entierros, por lo que han llegado a la conclusión de que pudieran existir restos de niños sacrificados ofrendados a Tláloc.
Estas conclusiones fueron compartidas con algunos biólogos para determinar la posibilidad de resistencia de restos humanos en el fondo de la laguna, y existen grandes posibilidades de que se pueda corroborar.