El Siglo de Durango
EL SALTO, P.N., DGO.- Un incendio en la Estación de Bomberos causó la movilización de ciudadanos que paseaban y participaban de una kermés en la plaza principal y de los mismos tragahumo. El siniestro se convirtió en el tercero en una semana.
Al parecer, el fuego inició en el área de compostura de vehículos, debido a la cantidad de materiales flamables que se encuentran en el lugar; las llamas alcanzaron unas llantas, para luego pasar a la oficina en donde quemaron y perforaron paredes de madera, además de provocar el estallido de los vidrios.
José Ángel Vázquez Lobatos, director de Seguridad Pública del Municipio de Pueblo Nuevo, mencionó que el incidente fue solamente un conato de incendio, que afectó solamente el área de mecánica, quemó algunas llantas e hizo una aparatosa humareda.
Algunos ciudadanos que se encontraban en el lugar alrededor de las 15:00 horas que se presentó el incendio ayudaron a apagarlo; algunos de ellos mencionaron que fue de manera repentina que comenzaron a aparecer las llamas.
Hubo llamaradas y no sólo humareda, comentaron algunos testigos; sin embargo, la pronta movilización impidió que la totalidad del edificio de madera quedara convertido en cenizas, pues aparentemente el fuego afectó sólo paredes y vidrios, a simple vista.
La gente que se reunió en el lugar señaló que el miércoles pasado se suscitó un incendio nocturno en una vivienda, mientras que este viernes algunos de los presentes dijeron que ayudaron a apagar otro en una casa. Ambos siniestros dejaron sólo daños materiales.
El Salto es una ciudad catalogada como de alto riesgo, según ha comentado Eladio Salas Saucedo, jefe de Bomberos del municipio, quien ha señalado la época de calor como peligrosa para la cabecera debido a que una gran cantidad de viviendas están construidas a base de madera.
Mientras tanto, los incendios que se han presentado en tan sólo una semana exhiben la vulnerabilidad a la que está expuesta la ciudadanía, en una ciudad construida con material inflamable.
El Director de Seguridad Pública, por su parte, destacó el hecho de que el incidente no haya pasado a mayores, como pérdidas de vidas humanas o propagación del fuego y derribo de inmuebles.
Exhiben vulnerabilidad
Durante más de 20 años, los bomberos de El Salto han tenido que trabajar con un equipo que cada año se vuelve más obsoleto, cambia el personal, pero las botas, uniformes y unidades siguen siendo los mismos.
Algunos habitantes hablan de manera irónica de la Estación de Bomberos, mencionando que más parece un museo que una dependencia de servicio público.
El Ayuntamiento, a principios de la administración, buscaba la reubicación del edificio de Bomberos, para un desempeño más eficiente; sin embargo, los conflictos de los terrenos que pertenecieron a Ferromex y en donde se tenían planeado acomodarlos ha sido un impedimento.
Lo cierto es que es necesario hacer algo para mejorar la calidad del servicio que ofrecen los hombres que se arriesgan a exponer sus vidas para salvar la de otros, a manera de vocación, pues ni salario reciben.
