El productor David Heyman y Daniel Radcliffe durante la presentación en Tokio de la cinta Harry Potter y la Orden del Fénix. (AP)
Hechiza a los japoneses Asiste Daniel Radcliffe, al estreno de Harry Potter y la Orden del Fénix en Tokio
TOKIO, JAPÓN.- Japón cayó ayer rendido por el hechizo de Harry Potter en el estreno de más reciente película del niño mago más conocido, Harry Potter y la Orden del Fénix, con la presencia de Daniel Radcliffe simpático y entregado a su público.
“Son un público increíble”, afirmó el joven protagonista desde el escenario dirigiéndose a los varios miles de personas que le esperaban, en su mayoría jóvenes y mujeres.
Aunque el acto era el primer pase en todo el mundo de Harry Potter y la Orden del Fénix, la casa Warner, productora y distribuidora de la película, ha decidido que éste sea tan sólo el estreno para Japón, y dejar de nuevo el honor de la premier mundial para la semana que viene en Londres, como en anteriores ocasiones.
Así, Tokio vuelve a confirmarse como uno de las capitales mundiales del cine, después de que en los últimos meses se hayan estrenado en esta ciudad Spiderman 3 y Cartas desde Iwo Jima. En 2007 los grandes estudios de Hollywood han hecho un esfuerzo por volver a reafirmarse en el mercado nipón, el segundo más importante del mundo, tras unos años de progresivo declive.
Durante la presentación de hoy, Daniel Radcliffe se mostró asombrado por la acogida del público japonés, algunos disfrazados como los personajes de la saga, que no dejaban de pedirle autógrafos, sacarle fotos con sus cámaras digitales y sus teléfonos móviles, mientras gritaban y coreaban su nombre de pila.
El actor necesitó casi una hora para recorrer medio centenar de metros de alfombra roja y llegar hasta el escenario, por la pasión que su personaje y él mismo desataron entre los presentes.
Redcliffe se mostró sonriente en todo momento, sacándose instantáneas con sus seguidores, firmando posters, cuadernos, fotografías y carátulas de DVD.
Desde la primera película de la saga de Harry Potter en 2001, cada nueva cinta ha sido un éxito en las taquillas niponas. La entrega anterior del joven mago, Harry Potter y el Cáliz del Fuego, consiguió la mayor recaudación del año pasado en Japón.
“Habéis sido uno de nuestros apoyos más fuertes”, reconoció Radcliffe desde el escenario y añadió que la última cinta de la saga era una película “impresionante” por el trabajo del resto del reparto, la trama y el derroche de los efectos especiales con que se había aderezado el largometraje.
A continuación, y con la ayuda de todo el público, el actor británico, convertido por un momento en Harry Potter, recitó su fórmula mágica coreada por el público y un enorme haz de rayos láser se elevó hacia el cielo, ya anochecido, de Tokio.
La mayoría de fans del joven mago hicieron cola durante varias horas junto al escenario al aire libre de Ropongi Hills, uno de los complejos urbanísticos más modernos y lujosos de la capital nipona.
Kumiko Shibue, tokiota de 20 años, llegó junto a su amiga Yukiko Hashimoto poco antes de las tres de la tarde al lugar donde iba a celebrarse el primer pase de la película con la esperanza de poder hacerse con un autógrafo del actor que encarna a Harry Potter.
“He leído todos los libros y he visto todas las películas”, afirmó emocionada, sin soltar en ningún momento el bolígrafo y la foto donde quería que Radcliffe estampara su firma, cuando aún faltaba más de una hora para que el actor británico apareciese en escena.
La nueva película, de más de dos horas, es la “más terrorífica de las vistas hasta ahora”, según afirmó David Yates, director de la cinta, en la presentación de la película en Londres.
Yates reveló en el acto, celebrado hace tres días, que en la película Harry Potter y sus amigos deben enfrentarse directamente al ejército del malvado Lord Voldemort, asesino de los padres de Harry.
Además, la cinta cuenta con uno de los momentos más esperados por la mayoría de los seguidores de la saga, el esperado primer beso cinematográfico con Cho Chang, encarnada por la actriz Katie Leung, y para el que se requirieron hasta 24 tomas.
Dice Radcliffe que Equus lo hizo un artista completo
La obra de teatro Equus fue en efecto una de las mejores decisiones que pudo haber tomado Daniel Radcliffe, o por lo menos así lo asegura el joven actor, pues dice que ese proceso lo convirtió en un artista completo.
"Al hacer esas escenas tan especiales pierdes todas las inhibiciones y ya que lo logras, adquieres confianza y sientes que puedes hacer todo".
En entrevista durante la presentación de la quinta entrega de la cinta del aprendiz de mago, Harry Potter y la Orden del Fénix, Radcliffe recalcó las diferencias que encontró del teatro al cine.
"Me enseñó mucho el estar en escena. Con Potter, o en cualquier filme, haces una escena por dos minutos y cortan, y así se continúa por siempre y se pierde el ritmo. En teatro no es así; ahí se te enseña a sostener ese nivel de concentración por un largo periodo de tiempo. Me enseñó la disciplina de la escena, algo que aprecio mucho".
Con respecto a lo que se dijo sobre la censura por parte de los padres por haberse desnudado, y de las posibles repercusiones que pudiera tener con su personaje de brujo, asegura que mucho de eso fue generado por los medios, pues no trascendió.
"Muchos actores hacen papeles de asesinos y el siguiente año actúan en una cinta para niños. Potter sí es para niños, pero no sólo soy un personaje, soy un actor y haré diferentes papeles por el resto de mi vida.
"Si las personas tienen un problema con ello, pues es muy triste porque los pequeños se perderán de lo que le depara a Potter".
Harry Potter y la Orden del Fénix comienza a despuntar con una oscuridad latente en la trama, la cual, dice Radcliffe, tiene que pasar.
"Cada año decimos lo mismo, que será más oscura que las otras, pero eso tiene que pasar, porque los libros son así y les tenemos que hacer justicia".
Con respecto al final del personaje al que le ha dado vida por cerca de diez años, dice que sí lo extrañará.
Con su fiesta de cumpleaños a la vuelta de la esquina, el joven actor, que apenas cumplirá la mayoría de edad, dice sentirse satisfecho con lo que ha logrado hasta ahora y asegura que la actuación sí está en sus planes a futuro.