Los príncipes Williams y Harry dieron la bienvenida a los más de 63 mil asistentes que se reunieron en el estadio de Wembley para recordar a su madre, la princesa Diana. (Fotografía de AP)
Cerca de 63 mil personas acuden al concierto en honor a Lady Diana, fallecida hace diez años
MÉXICO, DF.- En los rostros de los jóvenes príncipes se veía reflejada la satisfacción. Llegaron poco antes de la una de la tarde a verificar los últimos detalles de la organización del primer magno evento del que se hacen cargo personalmente. Más de 63 mil almas se reunieron en el estadio de Wembley para recordar a Diana, a diez años de su muerte y en lo que hubiera sido su 46 cumpleaños.
“Nuestra madre estaría sorprendida de que hubiéramos podido realizar todo esto nosotros solos”, dijo el príncipe William al terminar de pasar revista. Muchos especulaban que la enorme sonrisa que adornaba su rostro era por la perfección que veía a su alrededor. Otros dicen que tenía más que ver con la inminente llegada de su ex novia, Kate Middleton, de quien, aseguran, no ha podido olvidarse.
Por su parte, Harry, veía todo con mirada ilusionada. Subieron al escenario, probaron el sonido. Cuando se dieron por satisfechos entraron a los camerinos para cambiarse.
Afuera del Estadio de Wembley la gente se arremolinaba desde temprano. Las explosiones registradas en Londres y Glasgow en días pasados, hicieron que se redoblara la seguridad alrededor del recién remodelado estadio.
A los asistentes se les pidió que llegaran al menos a las dos de la tarde (dos horas antes de comenzar) y que no llevaran bultos grandes, botellas de vidrio o armas punzocortantes. Se les pedía colaborar en todo momento para agilizar la entrada y empezar a tiempo.
Las 63 mil personas que se reunieron siguieron al pie de la letra las indicaciones y, a las cuatro de la tarde en punto, las luces del escenario se encendieron. Entre la multitud se observaban personas de todas las edades, incluyendo muchos jóvenes que acudieron al llamado de los miembros de la casa real que representan a su generación. Muchas mujeres usaban sombreros tipo cowboy en color rosa, tono emblemático de la princesa de Gales.
Los príncipes dieron la bienvenida al público desde el escenario, un tanto nerviosos y con fichas en la mano para recordar las palabras, pero al final, con gran aplomo.
William señaló que una fiesta así, le hubiera encantado a su madre: “con música, baile, amigos y una causa filántropica”. Por su parte, Harry recordó a sus amigos, los soldados que pelean en Irak: “espero que no les pase nada y créanme, me hubiera gustado estar junto a ustedes”.
Acto seguido, presentaron la primera sorpresa: nadie se esperaba que sir Elton John abriera el concierto, pero así fue. Sir Elton John, el gran amigo de Diana Spencer subió al escenario, saludó a los jóvenes y se sentó al piano para cantar Your Song, mientras en una pantalla gigante se proyectaban las imágenes de la princesa que le tomara el fotógrafo Mario Testino.
Los príncipes se olvidaron de los nervios y fueron a tomar sus localidades en el palco central. Desde allí disfrutaron el concierto en compañía de amigos, de su prima, Zara Phillips; Harry se sentó al lado de su novia Chelsey Davy, y obsequiaron a los paparazzi con apasionados besos que dieron la vuelta al mundo.
Kate Middleton hizo su aparición para sumarse a las pocas decenas de invitados especiales que ocuparon el palco principal. En la tercera fila y un poco alejada de William, comentaba el espectáculo con los amigos comunes y coreaba las canciones. Los rumores de un feliz regreso están por el momento al rojo vivo.
Los hijos de Diana y Carlos de Gales cantaron, bailaron, hicieron “la ola” a la mexicana y pasaron seis estupendas horas recordando a su madre. “En los últimos diez años hemos visto y escuchado todos los argumentos de las personas que se enfocan en las cosas malas o escandalosas que hubo en su vida”, comentó William. “Por eso quisimos organizar esta fiesta: para recordar todo lo bueno que había en ella, principalmente su bondad”.
Para cumplir este propósito, los dos millones 835 mil libras esterlinas (alrededor de 61 millones y medio de pesos) que se recaudaron servirán para apoyar a las organizaciones caritativas de las que era patrona la “princesa del pueblo”.
En grande
Los príncipes Harry y Williams quedaron satisfechos con el resultado del concierto.
-La banda favorita de la princesa, Duran Duran, cantó Río, la que según John Tailor, integrante del grupo, era su melodía preferida.
-Sobre el escenario fueron apareciendo Elton John, Fergie, Nelly Furtado, Joss Stone, Kanye West, Anastacia, Rod Stewart, entre otros.
-El momento más emotivo fue el cierre, en el que no faltaron algunas lágrimas. Sir Elton John volvió al escenario y la “Rosa de Inglaterra” estuvo presente en los corazones de todos los asistentes.
