ARIES: Atiende tu espiritualidad, así sabrás más sobre la dirección y el propósito de tu vida. Distingue entre tu personalidad exterior y tu ser interior.
TAURO: Eres lo que pareces ser, en tu interior como por fuera, no hay mucha diferencia. Eres una persona de dones, posees un gran magnetismo, calor humano y una mente poderosa y aguda.
GÉMINIS: Lograrás hacer lo que quieras, si consigues impulsarte hacia una dirección y mantenerla firme. Tu carta es muy afortunada, pero puedes caer en la pereza, si no perseveras en el movimiento.
CÁNCER: Puede que encuentres más conveniente descuidar de momento tus habilidades mentales, conceptuales y organizativas, en favor de tu agilidad social e instintos.
LEO: Encuentras más fácil actuar conforme a tus instintos animales, que desarrollar tu mente. Te desenvuelves con todo tipo de personas con enorme facilidad.
VIRGO: Cada persona tiene una o más cualidades claves. Interrógate, no sobre tu apariencia o personalidad, sino sobre tu naturaleza interior, cómo eres, cómo y si te conoce la gente verdaderamente.
LIBRA: La luz de tus ojos lo dice todo: tus ideas guían tu interior y tu vida filosófica. Las comunicaciones a nivel interior y espiritual no son sólo importantes, sino indispensables.
ESCORPIÓN: La mentalidad es el conducto a través del cual todas las otras partes de tu ser funcionan y se relacionan. Tu seriedad exterior y acercamiento claro a las cosas, es obvio.
SAGITARIO: Tu gran sentido de responsabilidad es determinante para tu personalidad y la manera en que te das a los demás. Todo se revela ante tu mirada.
CAPRICORNIO: El punto clave en tu personalidad es tu mente, que marca el factor más activo de tus creaciones artísticas. Pierdes mucha energía caminando contra el viento y chocando contra tu verdadera vocación.
ACUARIO: Te resientes por el cansancio en tus días de descanso y por eso no tomas las cosas en serio, no trabajas, ni tomas responsabilidades en tu hogar. Tiendes a una falta la organización y determinación.
PISCIS: Nada se completa sin ayuda de la disciplina y el conocimiento, y te resistes a esto, como al diablo. Evitas el trabajo y, de esta manera, tus probabilidades de éxito serán nulas.
