EL SIGLO DE TORREÓN
Torreón, Coah.- Las autoridades de los tres niveles de Gobierno dejaron de cumplir, desde hace casi tres años, las recomendaciones de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos para remediar el problema de contaminación por plomo en niños generada por la planta de Peñoles.
El descuido data al menos desde mayo de 2004, cuando la Secretaría de Salud federal delegó a la empresa Peñoles la responsabilidad de administrar y manejar el Fideicomiso del Programa de Metales.
Hasta ese momento funcionaba un comité interinstitucional conformado por representantes de los gobiernos Federal, Estatal y Municipal, que fue recomendado por el CDC en 2001, para vigilar las acciones del Programa de Metales de la Secretaría de Salud de Coahuila. El comité aún funciona, pero ha delegado sus facultades de supervisión, en contra de lo establecido en el reporte del CDC.
Por ahora, la Secretaría de Salud estatal se limita a recibir los monitoreos realizados por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa). La negativa de la Profepa a publicar esos estudios incumple otra de las recomendaciones del CDC.
Otra recomendación del CDC establecía ?educar a los funcionarios de salud sobre los efectos del plomo en los niños?.
Pero el Municipio de Torreón es la autoridad más marginada en la atención al problema. La directora municipal de Medio Ambiente, Susana Estens, dijo que aunque el Ayuntamiento tiene la obligación de solicitar los resultados de monitoreos, nunca lo ha hecho.
Funcionarios incluso ignoran los estándares para medir los niveles de plomo. Cuestionado sobre los límites permisibles de plomo, Alfredo Villalobos, director municipal de Programas Ambientales, dijo que en aire es de 45 microgramos de plomo por metro cúbico, y que en polvos en superficie estándares internacionales marcan 300 microgramos de plomo por pie cuadrado.
Estos datos fueron refutados por el investigador Gonzalo García Vargas, ex coordinador del Programa de Metales, quien explicó que la Norma Oficial Mexicana para aire marca un límite de 1.5 microgramos de plomo por metro cúbico de aire en un periodo de tres meses. En cuanto a los estándares internacionales para polvo, éste es de 400 microgramos por gramo de polvo.
En cuanto al monitoreo de plomo en sangre, la Secretaría de Salud dejó de practicarlo en 2004, otorgando la función a la Unidad de Salud Ambiental, manejada por Peñoles, que enfrenta la sospecha de que es ?juez y parte? en el monitoreo.
Reanudan pruebas
La Secretaría de Salud estatal reanudará la aplicación de exámenes de sangre en niños contaminados por plomo.
Jorge Durón Martínez, director de Salud Ambiental de la dependencia, dijo que Peñoles sólo se encargará de aplicar la mitad de los exámenes, mientras que el resto estará a cargo de la Secretaría de Salud, con el respaldo de la Universidad Autónoma de Coahuila.
Durón explicó que la medida se tomó ante ?algunas discrepancias en los resultados? de pruebas aplicadas por la empresa, y ante la desconfianza que grupos relacionados con este caso han mostrado por el hecho de que todos los exámenes estuvieran a cargo de la empresa. (Por L. Ramos)