La edad, el color de la piel y de los ojos son decisivos a la hora de escoger un nuevo look de nuestro cabello.
El cabello es el marco del rostro y, como tal su corte y color deben resaltar nuestros rasgos favorables. Por ello, si te quieres teñir, es necesario tomar en cuenta ciertos aspectos.
La edad, el color natural, la calidad del cabello, incluso el color de la piel y de los ojos se deben considerar al seleccionar el nuevo tono.
Según los expertos, la mujer debería permanecer siempre cercana a su tono natural y tener mucho cuidado con los cambios radicales, porque los resultados podrían no ser favorecedores del todo.
Lo ideal es elegir en un rango de dos tonos más claros o más oscuros que el natural, de modo que sólo se le aporte luz o intensidad a la cabellera.
Según la edad
En términos generales, las mujeres de 20 años puedes jugar con los excesos gracias a la frescura de su tez y ojos; a los 30, deben encontrar su estilo; a los 40, el objetivo es hacer todo lo posible por suavizar las facciones y darle un toque seductor; de los 50 en adelante, se debe buscar el color que las haga verse más jóvenes y mantenerlo brilloso y suave.
Combinar con ojos y piel
A las personas con tez mate y ojos oscuros nos les quedan los tonos muy claros; además, técnicamente, éstos colores sobre bases castañas o negras son muy difíciles de aplicar, se "caen" muy rápido y requieren de muchos cuidados. En este caso, es mejor pintar unas mechas marrón o miel; las caboa o rojizas también aportan brillo a la cabellera.
Coloración en casa
Las posibilidades de teñirse el cabello en casa son múltiples, ya sea para ocultar canas, darle reflejos o cambiar el tono.
Antes de aplicar el tinte es conveniente conocer si la cabellera está maltratada o no. En ese caso, hay que dar priopridad a devolverle la salud, pues de lo contrario, el tinte podría empeorar la situación.
Para lograr un color brillante, la técnica adecuada es primero aplicar en raíces, luego en medio y finalmente en puntas. Al momento de enjuagar, terminar con agua fría.
